Cerrados los accesos de Cibeles y Colón al apeadero de Renfe en Recoletos

Los accesos de las madrileñas plazas de Colón y d e Cibeles al apeadero ferroviario de Recoletos han sido cerrados por Renfe, con la oportuna autorización del Ayuntamiento de Madrid, el pasado fin de semana a causa de los numerosos hechos delictivos que allí se producían. Estos accesos, que no volverán a abrirse al público, permanecían cerrados por la noche por lo que un buen número de mendigos forzaban sistemáticamente las puertas para dormir en este lugar. Además, el túnel que unía los accesos de ambas plazas, de más de medio kilómetro de largo, era lugar de frecuentes robos y atracos.Por el apeadero de Recoletos pasa la línea ferroviaria que une las estaciones de tren de Atocha y Chamartín. El día 5 del pasado mes de julio, la Renfe solicitó al Ayuntamiento de Madrid -después de enviar un informe sobre las instalaciones- autorización para cerrar los accesos de las plazas de la Cibeles y de Colón al apeadero, que fue concedida a los pocos días.

Este fin de semana pasado se ha llevado a efecto la clausura de estos accesos del apeadero de Recoletos y quedan ahora únicamente los de las calles de Prim y de Villanueva. "Por éstos se accede directamente al vestíbulo del apeadero, y al no tener que pasar por el largo túnel no hay tanto riesgo de delincuencia", informó un portavoz de Renfe. Fuentes de la Policía Nacional confirmaron que en el túnel que unía los accesos ahora cerrados con el apeadero de Recoletos se producían frecuentemente atracos, tirones y otros hechos delictivos.

En mayo pasado, por ejemplo, se produjo el robo de 38 tubos fluorescentes, así como el dinero de las máquinas de reproducción instantánea de fotografías tamaño carné. Éstas se encontraban casi siempre fuera de servicio a causa del mal trato con que eran manipuladas. No obstante, los mayores destrozos los producían los mendigos, que arrancaban las puertas de entrada durante la noche para pernoctar en el túnel.