Thompson supera a Hingsen en las primeras pruebas del decatlón
Son dos metros y 100 kilos de musculos cubiertos por piel blanca contra 1,85 y 82 de piel casi negra. Son el alemán Jurgen Hingsen, recordman mundial, y el británico Daley Thompson, ex plusmarquista, campeón olímpico en Moscú 80 y del mundo en Helsinki-83. Ayer iniciaron en el Coliseo el gran duelo del decatlon. Al término de las primeras tres pruebas, el británico, gran competidor y con dos esplendidas marcas en 100 metros, 10.44, y salto de longitud, 8.01 metros, superaba a su rival, vencedor sólo en peso, y estaba en camino de batir la plusmarca mundial. En otras pruebas matinales, la española Teresa Rioné no consiguió clasificarse para las semifinales de 200 metros ni rebajar siquiera el récord de España.Thompson, mejor competidor, tenía otra oportunidad de imponerse a su gran rival e intentar quitarle nuevamente su plusmarca mundial, que es de 8.798 puntos. Hingsen, sonriente al principio, parecía, sin embargo, más nervioso que el británico. Antes de colocarse en los tacos de salida, se movía inquieto de un lado a otro. No se hablaban entre ellos.
El británico salió como un obús negro y logró un tiempo espléndido, digno de la competicion individual de 100 metros. Hizo 10.44, su mejor marca personal. Hingsen sólo pudo ser tercero, tras Kratschmer, en 10.91, a 17,centesimas de su mejor marca. Durante la prueba de longitud Hingsen permanecía más tiempo sentado, mientras Thompson, sobre todo despues de irse hasta 7,83 metros en el primero de sus saltos, charlaba. Incluso mandó por medio de un juez un mensaje de ánimo al lanzador de disco Slaney. Hingsen, con 44 metros de carrera, había saltado antes sólo 7,50. Sin embargo, iba a mejorar. Thompson se lo puso un poco más difícil y, con solo 40 metros de carrera, se fue hasta 7,84 en el segundo salto. La explosión llegó en los últimos saltos. Hingsen logró 7,80. Thompson miró de refilón. Los dos atletas se ignoraron en la competición, menos en los momentos clave. El británico, a continuación, saltó 8,01, la mejor marca conseguida jamás en un decatlón olímpico. Sumaba 1022,puntos y, al término de las dos primeras pruebas, dominaba con 1970, en clara ven taja sobre el paso de récord mundial (1852) e incluso de su mejor marca en Atenas-82 (1910). Hingsen estaba a 164 puntos (1806). Eran las once y media pasadas, casi dos horas después de comenzar. Tras un descanso, el primer lanzamiento de peso fue pobre y ahí se frenó un poco la carrera del récord. Hingsen sólo ganó con 15,87. Y Thompson se quedó en 15,72.
Teresa Rioné, eliminada
Teresa Rione sólo pasó una serie de 200 femeninos. Se clasificó cómodamente para la segunda ronda pero con 24 48, a casi un segundo de su récord nacional . En la segunda eliminatoria, con su estructura fibrosa, ya no pudo con el viento, aunque cumplió con 23.71, no lejos de sus 23.49. Fue sexta (se clasificaban sólo cuatro para las semifinales) y se despidió contenta de los Juegos, según comentó.
