Demasiadas incógnitas para una mañana de julio

La bolsa se resiste como gato panza arriba a perder las posiciones conquistadas en las últimas semanas. En ese empeño tiene como aliado la falta de órdenes de venta, aunque el dinero brilla cada vez más por su ausencia.Parece como si las vacaciones hubieran llegado masivamente a casa de los inversores. En la sesión del martes, el volumen efectivo contratado se redujo a 704,4 millones de pesetas, aunque la tendencia de las operaciones a crédito continúa marcada por el signo positivo: 44,7 millones de compras y 0,71 millones de ventas.

Así se demuestra que el mercado prosigue, a pesar de todo, con una clara tendencia alcista, aunque en estos momentos sufre un impasse, ya que los operadores esperan acontecimientos Quizá el más influyente de todos sea la concertación social, tema en el que no se consigue despejar incógnita alguna, y que ha conseguido desbancar a las adivinanzas sobre la hipotética y próxima crisis de Gobierno.

Mayores comentarios levantó la nota de rectificación de la Junta Sindical sobre la operación del Hispano Americano registrada el lunes y que, finalmente, no corresponde a la operación Commmerzbank -que, al parecer, Alejandro Albert firmó ayer en la ciudad alemana de Francfort-, sino a otra mucho más modesta: 80,8 millones de pesetas efectivas.

Tampoco despertó mayores entusiasmos la anunciada entrada de Carburos Metálicos -junto a la sociedad francesa Pechiney y a la surafricana Samancor- en Hidro Nitro. La operación acordeón que se prepara representa una reducción de capital en 2.283 millones de pesetas para asumir pérdidas y una ampliación paralela por 2.000 millones. Aunque las tres sociedades citadas se han comprometido a aportar 500 millones, cada una, no parece que los accionistas minoritarios se hayan vuelto locos de alegría. En todo caso, Hidro Nitro perdió ayer 2,25 enteros.

También ayer descontaron cupón Hispanif (60 pesetas netas, como complemento del ejercicio 1983), y que recuperó el dividendo y subió dos enteros; Indus (50 pesetas netas), y que terminó con el mismo resultado que la sociedad anterior, y Juan Bravo Dos (50 pesetas netas), que no fijó cambio.

Todas son pequeñas anécdotas para no repetir lo mismo que jornadas anteriores: que las eléctricas continúan siendo las estrellas del mercado, que los bancos prosiguen su atonía (ayer registraron un saldo comprador de 797 tíulos), y que las sociedades de inversión mobillaria ya tienen su índice particular en 151,28%. Los demás sectores, esperando a Godot. Telefónica, bien, gracias.

Es difícil con el pequeño volumen de operación que registra el mercado, que exista un cambio de tendencia notable. Las realizaciones de beneficios son ya recuerdo, pero la bolsa parece haber perdido todas sus fuerzas en esa contención de las órdenes vendedoras de días atras. Mientras el dinero no vuelva de vacaciones, no hay nada que esperar. Pero las lenguas viperinas hablan de cierto compás de espera frente a las incertidumbres del futuro, incluso más de índole fiscal que política o social. Y ahí entrarían -que no han entrado en la bolsa, claro- esos 18.000 millones de pesetas que, según todos los indicios, se han evaporado de las cuentas bancarias a lo largo de estos días.