Cine y deporte salvan un mediocre verano televisivo

Las programaciones de los medios audiovisuales suelen variarse cada tres meses. De esta manera, al comenzar el tercer trimestre del año, Televisión Española pone en marcha una serie de modificaciones destinadas a adecuar horarios y contenidos al período estival. Son dos los cambios que suelen incluirse en este tiempo: el aumento de los espacios ligeros y de las reposiciones.Convencionalmente, se considera este período de programación como el menos importante para la televisión-. Las audiencias se reducen de modo considerable y se piensa que los espectadores prestan menor interés por la pequeña pantalla. Ambas premisas, como fácilmente puede imaginarse, benefician poco a quienes se mantienen fieles frente al monitor.

El esquema que entra ruañana en funcionamiento se ha hecho, según declaraciones a este periódico de Ramón Gómez Redondo, direrctor de Programas de TVE, "siguiendo dos reglas de oro. En primer lugar, la valoración de este período como de transición, al tener en cuenta la costumbre habitual de la casa. En segundo lugar se ha considerado el descenso de la atención que la audiencia muestra en estos meses tiempo".

De hecho, prácticamente no hay novedades de interés, a lo que se suma la reciente desaparición de lo que eran los granules puntales de la televisión del cambio.' Fernando García Tola terminó su Si yo fuera presidente hace ya algunas semanas. Mercedes Milá despidió Buenas noches hace tan sólo unos días. Por último, esta misma tarde tomarán sus vacaciones Ignacio Salas, Pastora Vega y Guillermo Surnmers. Y sin embargo te quiero nació sin la confianza de casi nadie. Con el tiempo se había convertido en una de las escasas muestras de lo que quizá algún día pueda llegar a ser una televisión ágil, desmitificadora y original.

El único proyecto de cierta ambición nuevo es La orquesta. Será el sustituto del programa de Mercedes Milá en la noche de los jueves. La idea del programa es un híbrido de Si yo fuera presidente y del mismo Buenas noches. Combina entrevistas a personajes populares con conversaciones con gente de la calle. Como complemento final, música interpretada por una orquesta.

Los otros cambios son tan convencionales como el anterior. Vuelven dos clásicas de la casa, Clara Isabel Francia e Isabel Tenaille, como directora y presentadora, respectivamente, de Letra menuda. Se trata de un espacio magazine dedicado a lo cotidiano, sin dejar de lado la atención a los grandes temas: un "cajón de sastre", en palabras de su directora.

La estructura general no sufre apenas variaciones, salvo algunos cambios horarios. Se adelanta el bloque infantil-juvenil, que comenzará tras el telediario de las tres y se extenderá hasta las seis y media. El programa La tarde se retrasa, en consecuencia, a las siete y media. El resto, prácticamente igual.

"No hay que sacarle excesiva punta al tema de la nueva programación", afirma Gómez Redondo. "Es evidente que se - van a hacer sentir las ausencias más notorias, pero no nos enconttamos ante una programación de relleno. Los objetivos principales saldrán a la luz en los meses de octubre y enero, pero ello no quiere decir que en verano vayamos a ofrecer morralla".

Fórmula encontrada

"La fórmula en TVE ya está encontrada. No se puede estar renovando sin parar", afirma el director de Programas, "no hace falta seguir experimentando continuamente. Estamos en una fase de estabilización. El principal trabajo ahora es el de intentar recuperar el talante dinámico de los primeros meses de trabajo, que parece haberse perdido en parte".Para algunos mandos directivos de TVE, la pobreza de la nueva programación, basada casi exclusivamente en producciones ajenas y en las retransmisiones olímpicas, es consecuencia directa del parón que se produjo tras la larga recuperación hospitalaria que tuvo que pasar Ramón Gómez Redondo en Moscú meses atrás. En su ausencia nadie se atrevió a tomar decisiones e incluso se congelaron muchos de los proyectos previstos.

El actual organigrama de la casa da al director de Programas un poder que nunca jamás tuvieron sus antecesores en puestos similares. Ahora mismo, hasta los directores de las dos cadenas dependen de` sus órdenes. Durante su convalecencia se decidió que nadie le sustítuyera temporalmente. "La dirección de Programas", afirma Gómez Redondo, "es un poco todo. Es la responsable de lo que sale a través de la pantalla".