Ninguna de las tendencias de CC OO aceptará un acuerdo social si no cambia la política económica

"El congreso de CC OO rechazará la política económica del Gobierno, y ahí sí que no hay diferencias. Que nadie especule. Todos estamos de acuerdo en que la concertación social es imposible si no se modifica esa política". Las palabras pronunciadas ayer por Marcelino Camacho, secretario general de esta organización, resumían la postura que mayoritariamente se defenderá en el próximo consejo confederal, que tendrá lugar en Madrid a partir del próximo día 21, y a la vez trataban de dejar sentado que las diferencias en el seno del sindicato pueden ser coyunturales, pero no estratégicas. La nueva ejecutiva, según sus palabras, intentará recoger las distintas tendencias existentes en CC OO.

Marcelino Camacho, secretario general de CC OO, anunció ayer, al presentar el congreso confederal de este sindicato, que se celebrará en Madrid la próxima semana, que la candidatura que se presente para la nueva ejecutiva recogerá proporcionalmente las distintas tendencias existentes en el seno del sindicato. Así, desveló que los militantes miembros del PCC (Partido Comunista de Cataluña) habían "puesto algunas condiciones para llegar a una candidatura unitaria, que estamos intentando asumir". Condiciones que también han sido planteadas por el resto de las tendencias -socialista autogestionaria, independientes, los denominados por el propio Camacho como comunistas, etcétera- y que también se van a tratar de integrar en una lista cómun.El secretario general de CC OO reconoció que los miembros de la ejecutiva de CC OO que a su vez lo son del Comité Central del IPCE habían mantenido días pasados una reunión para tratar los temas del congreso del sindicato. También en este caso se llegó a la conclusión de que había que lograr una candidatura unitaria. La fuerza de cada tendencia decidirá, finalmente, la proporción de cada parte en la nueva ejecutiva. Marcelino Camacho insistió en que riqueza de la organización estaba precisamente en su pluralidad e independencia y recalcó que el sistema electoral del congreso -representación proporcional- garantizaba estos principios.

Política de negociación

La posición que el congreso tome respecto a la política de concertación sigue confusa, al menos a nivel de declaraciones. Aunque Marcelino Camacho y Julián Ariza, que le acompañaba, trataran ayer de convencer de la voluntad negociadora de CC OO, lo cierto es que continúa la incógnita sobre su participación, con lo que tendrá que ser el congreso el que defina claramente el papel a jugar por Comisiones.Hasta ahora Camacho y Arizacoinciden en su valoración: CC OO cree imposible un acuerdo global si no se modifica la política económica del Gobierno. Y la movilización de los trabajadores aparece como única vía para conseguir este cambio en la política gubernamental. Con estas premisas, la negociación sólo es posible si por parte del Gobierno se ponen sobre la mesa temas que, en algún caso, pueden estar incluso cerrados a nivel parlamentario: reforma del Estatuto de los Trabajadores en materia de contratación temporal, ley de Libertad Sindical, Seguridad Social, etcétera.

Julián Ariza fue tajante en este aspecto. "Lo único que queda por negociar", dijo, "son los salarios a la baja". Y expresó sus temores de que se llegara a un pacto social antes del verano entre UGT y la patronal CEOE. "CC OO", afirmó, "tiene que evitarlo". Pero a la vez los dirigentes del sindicato insisten en la negociación de un acuerdo de progreso que, a su juicio, no debe ser confundido con un pacto social que desmovilice a los trabajadores. "El pacto social", decía ayer Antonio Gutiérrez", lo han hecho imposible los propios trabajadores".

CC OO no renunciará a la política de movilizaciones. Agustín Moreno anunció que el sindicato prepara una campaña de cara a conseguir la apertura de negociaciones en el sector público, campaña cuyo eje central será precisamente la movilización del sector.