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Reportaje:JARDINERÍA

El arte de multiplicar los árboles

Para estas fechas en las que el calor comienza a apretar hay muchas tareas que acometer: una de ellas puede ser multiplicar arbustos y árboles que no son excesivamente frecuentes y que, por lo mismo, son más caros de lo habitual.Por ejemplo, membrilleros del Japón (Chaenomeles japonica) o clemátides (Clematis, sp.) por el procedimiento del acodo. £Éste consiste en coger una rama larga y flexible, y doblarla de manera que la curvatura de la rama quede enterrada mientras su extremo terminal queda al aire; el enterrado puede hacerse en el suelo en un recipiente grande. El suelo se mantiene fresco durante varios meses, hasta que el brote enraíza, momento en el cual puede cortarse de la planta madre.

Más información
ENRAIZAR BROTES

Por el procedimiento conocido como estaquillado se pueden obtener plantas a partir de brotes cortados (estaquillas) de una planta dada. Por ejemplo, cotoneaster, deutzia, celindos, fucsias y algunas clemátides. Para ejecutarlo corte brotes sanos de unos 15 centímetros de longitud y entiérrelos en una mezcla arenosa, aproximadamente en la mitad de su longitud. Esta mezcla debe colocarse en un lugar con buena luz, pero no directamente soleado (puede hacerse un tenderete con cañizo para sombrear), y debe mantenerse húmeda hasta el otoño. Para entonces estarán arraigados estos brotes, y antes de que vengan los fríos habrá que trasplantarlos a macetas pequeñas, con tierra arenosa para que desarrollen bien, en un lugar abrigado y sin heladas.

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