La policía detiene al preso que se fugo el 10 de marzo de un furgón celular

Vicente Gigante Real, de 28 años, que logró fugarse el pasado día 10 de marzo del coche celular que le devolvía a prisión tras testificar en el juicio contra funcionarios de la cárcel de alta seguridad de Herrera de la Mancha, fue detenido el pasado viernes por inspectores de la comisaría madrileña de los Cármenes, según informó ayer la Jefatura Superior de Policía.Gigante, que cumplía en el momento de la fuga una condena de 26 años por asesinato, ingresó el pasado lunes en la prisión de máxima seguridad de Meco, en Alcalá de Henares.

En la vista del juicio contra funcionarios de Herrera de la Mancha había solicitado garantías de que no iba a sufrir represalias al volver a la cárcel. Según afirmó, había sido amenazado de muerte si testificaba. El presidente del tribunal, Antonio Hernández Diez, le contestó entonces: "Bueno, pues si le matan, ¿qué le vamos a hacer?".

Gigante fue detenido en plena calle, en la localidad de Villaviciosa de Odón, por inspectores de la comisaría de los Cármenes, situada en el barrio de Aluche. Según fuentes oficiales, tras tenerse noticias sobre el paradero del fugado, inspectores de la comisaría citada se trasladaron hasta Villaviciosa, donde, después de una intensa vigilancia, lograron detener al fugado.

Al ser arrestado, según la misma fuente, le fue intervenida una pistola marca Star Lancer, calibre 22, cargada con siete proyectiles, que llevaba a la cintura. También se le ocupó una caja con 17 balas.

El recluso pasó los últimos 15 días de libertad en Villaviciosa de Odón y durmió alguna noche en el domicilio de Jesús Carmona Pérez, de 42 años. Al parecer, su intención era buscar trabajo en Villaviciosa, localidad en la que mantenía relaciones con una joven.

Carmona, que fue detenido en un primer momento en calidad de encubridor, se encuentra ya en libertad sin cargos.