La paz y la cultura

Ante la frívola forma de dar la noticia de la reunión celebrada por más de 500 profesionales en la discoteca El Sol, de Madrid, quisiera que quedara claro a los lectores del diario que usted dirige:1. Que ustedes son muy libres de dar la noticia o no darla, pero que, de hacerlo, un periódico de la solvencia y responsabilidad de EL PAÍS, que sirve de orientación para un conjunto importante dedemócratas españoles, lo debiera hacer con más seriedad, ya que un acto al que asisten más de 500 profesionales, artistas e intelectuales y políticos, como Santíago Carríllo (periodista), y líderes sindicales como Juan Ignacio Marín (ingeniero), por respeto a lo que es la cultura, la ciencia y la política, merece mejor lugar que la columna de chascarrillos.

2. Que la mayoría de los asistentes, no habituales clientes de discotecas, ni practicantes del trasnoche, asistimos, no para acompañar a Cristina Almeida a tomarse una copa, sino porque queríamos manifestar colectivamente que hay en Madrid una parte significativa de las fuerzas de la cultura que estamos por la paz, el desarme y la salida de España de la OTAN.

3. Que la libertad de expresión por la que tanto algunos hemos luchado les permite hacer el resumen tal y como su conciencia lo considere, pero allí se hizo algo más que añorar el Mayo del 68 y el hacer el amor y no la guerra, pues desde el estrado también se dijo, en mayo de 1984, por otro orador (no citado en el chascarrillo), que no se podían dedicar 600.000 millones de pesetas a armamento, cuando tenemos 2.300.000 parados y una reconversión industrial sin alternativa de reindustrialización, que está situando a España en una posición tercermundista, disminuyendo las inversiones productivas y aumentando los gastos militares- Miembro del Secretariado del Comité Regional de Madrid del PCE responsable de Técnicos y Profesionales. Madrid.