Los resultados contables del conjunto de la banca privada crecieron el 64% en el primer trimestre del año en curso

Los resultados contables del conjunto de la banca privada en el primer trimestre del año rozaron los 50.000 millones de pesetas -49.587 exactamente-, con un incremento del 64% sobre el mismo periodo del año anterior; de ellos, 27.330 (el 55%) corresponden a los siete grandes. Las cantidades destinadas a saneamiento de créditos superaron los 39.000 millones de pesetas. El incremento natural del negocio bancario, el escaso crecimiento de los gastos de explotación, unos niveles de saneamientos algo bajos para el conjunto de la banca y las ventajas diferenciadas de los bancos en proceso de saneamiento justifican un incremento tan fuerte de los resultados contables durante los tres primeros meses del año.

El conjunto de la banca privada que opera en España, incluyendo los bancos extranjeros, obtuvo unos productos financieros por valor de 656.301 millones de pesetas, y tuvo que hacer frente a unos costes financieros de 438.000 millones. El margen financiero se situó por encima de los 217.000 millones de pesetas. Los bancos obtuvieron, por otros servicios, más de 40.000 millones de pesetas, con lo que el margen ordinario fue de 258.726 millones de pesetas, con un crecimiento del 22,6% sobre el mismo trimestre de 1983.

Los gastos de personal

Los gastos de explotación, entre los que se incluyen los de personal, supusieron 154.866 millones de pesetas, con un incremento del 7,8% que ha sorprendido en algunos medios del sector. Así, se señala que el impacto de los gastos de personal sobre los totales de explotación no deben estar reflejados del todo en los balances ya que, aunque se firmó el convenio con un incremento del 7,3% y se están produciendo amortizaciones de puestos de trabajo, éstas no pueden ser tan elevadas como para que los costes de personal aumenten tan solo en el 5,6%.

El margen de explotación del conjunto de la banca se elevó a 103.860 millones de pesetas, con un crecimiento del 54%; cifra muy elevada y que se explica, según expertos, por la moderación en los costes generales y en el importante aumento de los productos financieros que están obteniendo los bancos en proceso de saneamiento que, al no tener que cubrir coeficientes, pueden colocar sus recursos a un tipo de remuneración media más elevada que la de las instituciones financieras que destinan casi la mitad de sus depósitos a financiación privilegiada a tipos de interés por debajo de los de mercado.

A primera vista sorprende que con un margen de explotación tan elevado, el conjunto de la banca haya destinado una cantidad relativamente pequeña a saneamiento de créditos, menos de 40.000 millones de pesetas, y a otros gastos y quebrantos algo más de 14.000 millones. Con ello los resultados contables se cifran en 49.587 millones de pesetas, con un crecimiento del 64%. sobre el mismo periodo de 1983. Los siete grandes bancos -Central, Banesto, Hispano, Bilbao, Vizcaya, Santander y Popular-han presentado unas cifras de crecimiento de resultados más modestas que el total de la banca porque lo obtenido por su inversión bancaria ha crecido menos que la del conjunto -tienen coeficientes- y porque han destinado cantidades más importantes a saneamiento de créditos; mientras que el año pasado los siete grandes destinaron en el primer trimestre 15.000 millones a saneamientos, en lo que va transcurrido de año han dedicado más de 27.000 millones, lo que significa un crecimiento del 83%.

El deterioro de la cartera de créditos de los grandes bancos y las recomendaciones del Banco de España de hacer mayores provisiones para morosos y fallidos antes que engordar en exceso los beneficios, parece estar en el fondo de estos resultasdos menos brillantes por parte de los grandes del sector. En cualquier caso, algunos expertos financieros consideran que los datos del primer trimestre del año en lugar de pronosticar un ejercicio con resultados brillantes, anuncian el final de unos meses considerados como buenos que darán paso a un deterioro progresivo de las cifras en los próximos trimestres para que el conjunto del año no pase de ser un ejercicio normal.