La oposición reitera sus críticas a la ley de Ordenación Territorial, aprobada ayer

La Asamblea Legislativa de Madrid aprobó ayer la Ley de Ordenación Territorial (LOT), sin que el Grupo Socialista, mayoritario en la cámara, aceptara apenas enmiendas de los diputados de Coalición Popular y el PCE, opuestos al proyecto. Los representantes de la oposición argumentaron que la ley representa un atentado directo contra la autonomía municipal.La LOT establece que la Comunidad de Madrid, mediante la Consejería de Ordenación del Territorio, Medio Ambiente y Vivienda, regulará el planeamiento supramunicipal de la región, distribuyendo el uso del suelo y fijando directrices que serán vinculantes para los ayuntamientos que forman parte de la comunidad autónoma. Los instrumentos de ordenación establecidos en la ley son las Directrices de Ordenación territorial, los Programas Coordinados de Actuación y los Planes de Ordenación del Medio Físico. La oposición en la asamblea criticó con dureza el hecho de que los planes generales de los ayuntamientos tengan que adecuarse a las directrices de planeamiento de la comunidad. Los diputados de Coalición Popular y el PCE se mostraron también en desacuerdo con la ausencia de los ayuntamientos de la elaboración de estas normas.

Esteban Egea, portavoz del grupo socialista, argumentó que la Comunidad tiene que velar por el ordenamiento territorial que afecte a dos o más municipios, para cumplir su función de compatibilización y defensa de los intereses generales de la región. El propio grupo socialista presentó una enmienda, que fue aceptada, por la que la aprobación de las directrices correrá a cargo de la Comisión de Urbanismo, en la que los ayuntamientos tendrán un tercio de los votos.

Por otra parte en la sesión plenaria celebrada por la tarde se rechazaron las enmiendas a la totalidad presentadas por los grupos Comunista y Popular contra el proyecto de ley por el que se crea el ente público Radio Televisión Madrid. La creación de este ente fue aprovechada por los grupos enmendantes para criticar la futura puesta en funcionamiento del tercer canal de tele visión por el gasto desproporcionado, que, a su juicio, producirá. Representantes del gobierno autónomo afirmaron, por su parte, que el futuro canal será autosuficiente y no costará nada a los madrileños.