Michel gana 800.000 pesetas y juega en Segunda División

Es el cerebro de la selección sub-21, el jugador que es capaz de enviar un balón en profundidad a 40 metros o sortear en un reducido espacio a dos o tres adversarios; incluso algunos afortunados le vieron en el Bernabéu, contra el Rayo, cortar un saque largo del portero, casi en el centro del campo, y lanzar un parabólico disparo que entró por una escuadra. Un tal Pelé había intentado algo similar en el Mundial de México. Se llama Michel, tiene 21 años y posiblemente puedan contarse con los dedos de una mano los jugadores del fútbol español que le superen técnicamente. Apenas llega a las 800.000 pesetas de ficha anual. Juega aún en el Castilla, en Segunda División. Un directivo quiso, hace algún tiempo, menospreciar sus cualidades calificándole como niño de papá. No ha nacido para ser un trotón porque sus características van por otro lado, pero ha aprendido a sufrir. Amancio demostró su capacidad psicológica al hacerle capitán del Castilla y darle la confianza que necesitaba. Ha visto cómo cuatro compañeros de la ya célebre quinta del Buitre han ascendido al primer equipo y, quizá, en su fuero interno, se pregunta una y otra vez qué le ha faltado a él para conseguirlo. "Los técnicos no lo habrán creído conveniente. Posiblemente, las características de mis compañeros eran las que se necesitaban en unos momentos determinados esta temporada", piensa.

Oficialmente, todavía nadie le ha dicho si va a subir al primer equipo. Él tiene esperanzas, pero cree que tendrá que seguir esperando. Mientras, ha mantenido, junto con sus compañeros, las opciones del Castilla al liderato en la Segunda División a pesar de las bajas de Sanchis, Martín Vázquez, Pardeza y Butragueño. Y se ha convertido en pieza clave del esquema de Luis Suárez en la selección sub-21. Suárez se dio cuenta de que no era de Segunda División y le da la camiseta número 4 o la 10, el doble guarismo que representa, por tradición, la máxima calidad.

Michel es el segundo jugador en la historia del fútbol español con mayornúmero de actuaciones internacionales en la selección juvenil: 25, una menos que el valencianista Tendillo. Jugó una vez con los olímpicos y cinco con los sub 21. Ha marcado en el Castilla nueve goles en la Liga y tres en la Copa. Lleva tres años en el filial madridista. Javier Clemente, por ejemplo, no lo habría consentido.