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Crítica:
Crítica
Género de opinión que describe, elogia o censura, en todo o en parte, una obra cultural o de entretenimiento. Siempre debe escribirla un experto en la materia

El pienso eurovisivo

Esa cosa en forma de poema que reproducimos al final no es de lord Byron, y se nota. Los letristas de canciones dicen que ellos son sólo "poetas funcionales" y que sus versos no pueden apartarse de la música para la que han sido destinados. Pero la funcionalidad suele ser un confortable refugio de la mediocridad, y como muestra sangrante bastaría con abstraer de su pentagrama letras de Brel, Serrat, Lennon o Violeta Parra, entró los muchos que ponen con ingenio palabras a la música.Que TVE, no es el Parnaso, se sabe. Se sabe también que sus envíos anuales al Festival de la Canción de Eurovisión podrían competir en un campeonato de subnormalidad lírica, y aunque este concurso tiene bien ganada fama de ser una justa entre egregios horteras europeos, TVE se suele exceder en la dosis mongólica y obliga a gente tan de ley como Remedios Amaya a farfullar filípicas que no hay Mozart que arrope: "Ay, ¿quién maneja mi barca, quién?, / que a la deriva me lleva, ¿quién?; / ay, ¿quién maneja mi barca, quién?, / que a la deriva me lleva, ¿quién?; / ay, ¿quién maneja mi barca?, / que a la deriva me lleva; / ay, ¿quién maneja mi barca!, / que a la deriva allí me lleva".

La pobre Remedios se llevó en 1983, con tal alarde de elocuencia, un cero redondo, a la turca, pero recordemos como bálsamo el 10 que le dieron a Massiel por disertar en el revolucionario 1968 de esta guisa: "Le canto a mi madre, / que dio vida a mi ser; / le canto a la tierra / que me ha visto crecer. / Y canto al día en que / sentí el amor. / Cantando por la vida / aprendí esta canción. / La, la, la (39 veces)"; o el otro 10 que le otorgaron a Salomé en 1969 por este antecedente sin brillantina del doliente suspiro macho, "¡Hey!", de Julio: "Desde que llegaste / ya no vivo llorando, ¡Hey!, / vivo cantando ¡He!, / vivo soñando, ¡He! / Sólo quiero que me digas / qué está pasando, / que estoy temblando / de estar junto a ti".

Grano de Julio

Por cierto, también Julio Iglesias aportó en 1970 su grano de podre al cementerio eurovisivo con su agónica Gwendolyne: "Tan dentro de mí / conservo el calor / que me hace sentir. / Conservo tu amor / tan dentro, de mí / que ya puedo vivir / muriendo de amor, / muriendo de ti". En el estilo, entre llorica e indignado, del también inmortal, pero menos Raphael-67: "Hablemos del amor / una vez más, / que es toda la verdad / de nuestra vida; / paremos un momento / las horas y los días / y hablemos del amor / una vez más". Son los platos fuertes de un banquete filosófico que inició Conchita Bautista-65 con esta meditación de altos vuelos sobre la relatividad del tiempo y la condición fugaz de la vida: "Las horas parecen siglos, / los días la eternidad. / Después, cuando estás conmigo, / el tiempo volando se va".O el revolcón al dulce José Vélez por su nostálgico llanto turístico en lomos de esta sutil elegía mundana: "¡Oh, Michele!, / ¿dónde estás? / Yo no sé si tú recordarás / el verano que juntos / pasamos los dos / y que nunca / podré yo olvidar. / ¡Oh, Michele!, / te perdí; / nunca más / he sabido de ti. / Sólo espero que un día / regreses a mí y de nuevo / te pueda pedir: Voulez-vous danser avec moi?".

Ni los arpegios de Mudarra redimirían el perfume de esta joya de la cursilería universal. O el olor a aldea de la gloria de escepticismo gitano que le enjaezaron a Peret en 1974: "Si eres tan inteligente / que nadie puede entenderte, / enfadarte con la gente/ no sirve de ná. / Si al sol no puedes tumbarte, / ni en paz tomarte una copa, / decir que estás en Europa / no sirve de ná, / no sirve de ná, / no sirve de ná". Ingeniosa aplicación de la teresiana moral de los pucheros al pienso contemporáneo, como el increíble parte meteorológico de Jaime Morey en 1972: "Amanece, / la lluvia moja lentamente mi despertar, / la gente-camina cerca de mi soledad sin parar. / Amanece, / parece que el cielo se nubló para nosotros...".

O el tempestuoso Bachelli-81: "Y solo tu, / y solo yo, / el cielo azul y en tus ojos el amor, / mirando al mar embrujador / nos abrazamos con la fuerza de un ciclón".

O el obvio Trigo Limpio-80, con este monumento a la sensatez: "Suelta las llaves y pon la maleta / de nuevo en su sitio otra vez, / piensa que no hay que enfadarse / y menos marcharse sin decir por qué". O la ligona etílica Lucía-82: "Ven, tengo libre de 8 a 10, / nos podremos divertir / y tomarnos una copa". O la fuga de Sergio y Estibaliz-75: "Toma tu vida y tu mochila". O el nuevo lalalá o blablablá de Micky: "Enseñamé a cantar". O, en fin, como certificó Braulio en 1976: "A veces hasta sobran las palabras". Exacto.

Lady, lady

Esta es la letra de la canción que hoy representa a TVE en Eurovisión:"Al atardecer, al ponerse el sol, sale a pasear por la calle Mayor. / Su pamela gris, su traje de almidón, / perfume de jazmín, / botines de charol. / Lady, lady, lady. / Se pinta los ojos de azul, / aunque hace mil años dejó atrás su juventud / Cuando un día de verano / le quebró un desengaño. / Lady, lady, lady. / Vive en su mundo de cristal, / cree que algún día / él volverá. / Vive de alquiler en una habitación, / colgada en la pared / la foto de un señor. / Su vida transcurre en nubes de algodón, / sueño de papel, en busca de su amor. / Lady, lady, lady".

El 29º Festival de la Canción de Eurovisión se retransmite en directo esta tarde, a las 20.30, por la segunda cadena.

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