La Audiencia de Barcelona decidió no examinar la querella contra Pujol
El pleno de la Audiencia Territorial de Barcelona, que se reunió el pasado jueves para examinar la querella por presuntas injurias y calumnias contra el presidente de la Generalitat Jordi Pujol, decidió sólo por tres votos de diferencia declararse incompetente para examinar la causa. La querella fue presentada por el diputado electo Josep Maria Bricall.El sector de magistrados que perdió la votación reclamaba la competencia del pleno aduciendo, entre otras razones, que "había que resolver con urgencia el tema" y que "no sé podía crear una situación de inseguridad jurídica en torno al presidente de un país".
Esta información, que fue facilitada ayer en medios jurídicos, fue celosamente silenciada por el presidente de la Audiencia Territorial, Cesáreo Rodríguez Aguilera, en la conferencia de prensa celebrada tras el pleno de los magistrados.
La sesión del pleno de la Audiencia Territorial, según los citados informantes, se inició con la lectura de un dictamen elaborado por el magistrado juez Toribio Salinas, presidente de la Sala Segunda de lo Civil de la la Audiencia.
En este informe, que le había sido requerido por el pleno en la sesión anterior, Toribio Salinas aseguraba que las frases pronunciadas por Jordi Pujol en plena campaña electoral sobre el diputado electo Josep Maria Bricall no eran injuriosas. Añadió el ponente que Jordi Pujol había hecho una afirmación, que podía ser cierta o no, pero en ningún momento injuriosa.
Ahora la situación jurídica de la querella ha sido calificada como "confusa". Algunos juristas opinan, que el tema depende del Tribunal Supremo, que recordara en el caso Barrera-Viñals recordará la vigencia del Reglamento del Parlament, en el que se establece que el Pleno de la Audiencia es el competente, en ausencia del Tribunal Superior. Otros afirman que el querellante puede requerir del pleno que reconsidere, con un nuevo auto, su resolución.
