Guillermo de Gales,

primogénito de los príncipes Carlos y Diana, se convertirá, el próximo día 21 de junio, fecha en la que cumple dos años, en propietario de un lujoso automóvil Jaguar, modelo XJS Cabriolet, que le está construyendo la compañía en tamaño reducido. El coche, que costará alrededor de 84.000 dólares, -más de doce millones y medio de pesetas-, tendrá asientos de cuero, salpicadero de nogal y alfombrillas de felpa, porque la Jaguar ha considerado que es lo mínimo para un automóvil principesco. Ante las fuertes críticas que la noticia ha suscitado en Gran Bretaña, dado el valor del regalito, un portavoz del Palacio de Buckingham ha señalado que no hay por qué escandalizarse, porque se trata de "un simple juguete".