Preacuerdo por 120.000 millones para fabricar carros de combate

La Empresa Nacional Santa Bárbara y la firma Krauss Maffei, de la República Federal de Alemania, han firmado un precontrato para la fabricación en España de carros de combate valorados en unos 120.000 millones de pesetas, precio total del proyecto. El acuerdo, así como las características del futuro carro y el sistema que se utilizará para fabricar cerca de 500 unidades, fue entregado el pasado miércoles al secretario de Estado de Defensa, Eduardo Serra. El Ministerio de Defensa estudiará en las próximas semanas la oferta de las dos compañías, mientras el Ejército de Tierra realiza evaluaciones técnicas sobre las características del nuevo carro. Paralelamente, en los próximos días también presentarán ofertas los fabricantes de carros de combate franceses, italianos y estadounidenses. La competición estará centrada, según los expertos, entre alemanes y franceses, si bien se estima que los primeros cuentan con mayores ventajas técnicas para el Ejército de Tierra.

El proyecto español, que comenzará a desarrollarse a principios del año próximo, consiste en la construcción de un carro nacional, aunque basado fundamentalmente en tecnología extranjera, y es en esta área en la que compiten los países citados. El pasado mes de febrero, y con motivo de la visita a España del ministro alemán de Defensa, Manfred Wörner, éste llegó a un acuerdo inicial con su homólogo español, Narcís Serra, para que la industria española pueda utilizar la tecnología alemana en el desarrollo del carro de combate español para los años noventa.

El nuevo carro, que, se denominará Lince, tendrá unas 50 toneladas de peso y estará equipado con un motor de unos 1.300 caballos de vapor de potencia. Básicamente, el interés español está basado en la tecnología del carro alemán Leopard 2, de 50 toneladas, 600 kilómetros de autonomía y un cañón de 120 milímetros de calibre. Éste es el carro que actualmente fabrica Krauss Maffei, que ya está desarrollando el Leopard 3, parte de cuyos avances podrán ser aplicados en el futuro carro español.

De los 500 carros de combate cuya fabricación está prevista en España, al menos 100 serán destinados a la exportación, posibilidad incluida en el precontrato firmado por Krauss Maffei y Santa Bárbara.

Este preacuerdo o contrato previo sólo será firme si el Consejo de Ministros se decide definitivamente por la tecnología alemana. Tras los correspondientes estudios y evaluaciones, en los que también intervendrán la Dirección General de Armamento y Material (DGAM) y la Comisión Asesora de Defensa de Armamento y Material (CADAM), está previsto que el Gobierno anuncie su decisión el próximo mes de junio.

El Ministerio de Defensa designó recientemente a Javier Quílez, experto en la fabricación de armamento pesado, para coordinar la gerencia del programa de construcción del futuro carro de combate.