Cuanto se podía hacer

Los últimos años del franquismo fueron probablemente los peores para el cine español. La ya clásica ambigüedad de la censura cobró entonces una insólita fuerza, y entre lo que se consideraba moderno y permisible y lo que prohibía obedeciendo las viejas consignas, armó un grave lío entre cuantos cineastas continuaban empeñados en remontar el vuelo por encima de lo autorizado. Algunos, como Saura, supieron encontrar la fórmula de no traicionarse, y otros, como el entonces guionista José Luis Garci, proponían unas tibias fórmulas de comedia que se localizó con el también ambiguo estigma de la tercera vía.Angelino Fons, en cambio, no tuvo suficiente inspiración para luchar por su cuenta y comenzó así a entregarse a las sugerencias de los productores a quienes sólo interesaba la posibilidad de utilizar ese bache en películas de rápido consumo, que versaran, y no versaran, sobre la realidad de la España de entonces, y fue abandonando, por aburrimiento y por falta de mejores ofertas, aquella propuesta de La busca, su primera película, con la que alimentó las esperanzas de un resurgimiento del cine español de los sesenta. Sólo más tarde, en Emilia, parada y fonda, recuperó su primitivo aliento: su obra restante, aunque mejor realizada que la de otros, no ha merecido, en justicia, la atención de quienes habíamos aplaudido su mejor oferta.

Separación matrimonial, aunque data de 1972, uno de los años de mayor dificultad, quiso plantearse el tema del divorcio. Pero entre el rigor de aquellos miopes censores y la variedad de unos guionistas que difícilmente podían apoyar los planteamientos de Fons (el cronista radiofónico Carlos Pumares y el productor Juan José Daza), el producto quedó transformado en un híbrido que a nada respondía. Incluso Fons lo dirigió sin entusiasmo, respondiendo al tópico del texto con un equivalente de imágenes. No bastaron las tesis que encarnan los personajes de José María Cafarell y Francisco Pierá para salvar una propuesta sin interés. Fue un paso triste en la carrera de un director que aún está por descubrir.

Separación matrimonial se emite a las 22.45 por la primera cadena.