Ruiz-Mateos telefoneó el domingo a su familia para comunicar que "estaba bien"

José María Ruiz-Mateos llamó el domingo por la mañana a su familia en Londres para comunicar que "estaba bien" y que no había llamado telefónicamente en casi tres semanas "porque no he podido", según confirmó ayer a EL PAIS su esposa, María Teresa, Rivero.María Teresa Rivero no quiso explicar desde dónde llamó su marido, ni qué razones había dado para su repentina desaparición. "Sus motivos tendrá, y ya nos lo dirá cuando venga", afirmó.

Una vez recibida la llamada, la esposa de Ruiz-Mateos avisó a la policía londinense, a fin de anular la denuncia que había sido presentada hace dos semanas. Scottland Yard confirmó que Ruiz-Mateos no figuraba ya en la lista de personas desaparecidas.

María Teresa Rivero admitió que "todo había resultado muy extraño" y que la falta de explicaciones no iba a acallar los rumores, pero añadió que su vida privada no era asunto de nadie más y se negó a dar credibilidad a las informaciones publicadas sobre las actividades de su marido durante estos últimos 20 días. "Yo he hablado otra vez con la esposa de Sabater, Misericordia Miarnau, y me ha prometido que va a presentar querella cotra todos los diarios que nos han difamado", añadió.

En este sentido, los 13 hijos de Ruiz-Mateos hicieron pública anoche una carta dirigida a la opinión pública en la que defienden la figura de su padre y lanzan duras críticas contra determinados medios de información.

Por otra parte, Honduras niega haber entregado pasaporte alguno a Ruiz-Mateos, según una nota hecha pública por la Dirección de Información y Prensa del Ministerio de Relaciones Exteriores de Tegucigalpa. La nota señala que, no obstante, "se están siguiendo las investigaciones del caso, a efectos de que, de comprobarse alguna irregularidad, se deduzcan las responsabilidades correspondientes de conformidad con la ley".