El presidente de la Generalitat convoca las elecciones catalanas para el 29 de abril

El presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, firmó ayer por la mañana el decreto de convocatoria de las elecciones autonómicas catalanas, que se celebrarán el próximo 29 de abril. Pujol rodeó de una especial solemnidad el acto, que se celebró en uno de los salones del Palau de la Generalitat reservado para las grandes ocasiones, como las tomas de posesión de consellers.

El decreto apareció ayer mismo en el Diari Oficial de la Generalitat (DOG) y consta de un artículo único, en el que se señala la fecha del 29 de abril como jornada electoral y se regula que, de acuerdo con la disposición transitoria cuarta del Estatuto de Autonomía, la circunscripción de Barcelona elegirá 85 diputados, y las de Gerona, Lérida y Tarragona, 17, 15 y 18 diputados, respectivamente. El Parlamento catalán no ha elaborado una ley electoral propia, por lo que sigue vigente el régimen provisional que se aplicó en los comicios de 1980 y que, en líneas generales, es idéntico al que rige en las elecciones legislativas. El Parlament se disolverá automáticamente el 20 de marzo, al cumplirse cuatro años desde su elección.Pujol destacó, en unas breves palabras que pronunció al final del acto, que ésta será la primera vez que Cataluña organice las elecciones autonómicas, y afirmó que esto significa "un nuevo hito en el proceso de normalización de la vida democrática".

Socialistas y comunistas han sido los primeros partidos en hacer públicas sus candidaturas electorales. Los socialistas las anunciaron hace 15 días y el PSUC (comunista) las aprobó este fin de semana. Hasta el próximo día 15 no se conocerán formalmente las de Convergència Unió, la coalición que ha gobernado la Generalitat estos últimos cuatro años, y antes, probablemente, las hará públicas la Coalición Popular.

Las candidaturas de CiU se confeccionan no sin conflictos, derivados a menudo de los intereses distintos de los partidos coaligados. Unió Democrática de Catalunya (UDC) no admitirá presiones del presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, para que aquel partido incluya al conseller de Trabajo de la Generalitat, Joan Rigol, como candidato de la coalición. Un portavoz autorizado de UDC declaró ayer que es "imposible, con los estatutos en la mano", que Rigol, militante del partido democristiano catalán, sea candidato al Parlament, ya que no presentó su opción en las organizaciones de base del partido. La dirección de Unió ha tomado buena nota de las presiones de Pujol, casi siempre indirectas.

Una información periodística, que situaba a Rigol en el puesto número ocho de la candidatura de CiU por Barcelona, provocó ayer las iras en las filas del partido democristiano catalán, que la interpretaron como una presión más de la Presidencia de la Generalitat, ya que son conocidas las vinculaciones del rotativo que la publicaba con el círculo que rodea a Pujol.

Oficiosamente, los primeros candidatos de UDC por Barcelona ya están decididos: el puesto número dos lo ocupará el también conseller y líder histórico del partido Miquel Coll Alentorn; el número ocho Joaquim Pibernat; el 12, Ferran Pont; y el 16, Ferran Camps. Todos ellos son diputados en la actualidad.

Las listas del PSUC

La ausencia de independientes, con la excepción de Pere Portabella, es la nota más destacada de las candidaturas para las elecciones al Parlament del Partit Socialista Unificat (PSUC) aprobadas por el comité central el pasado fin de semana. El PSUC ha querido, en palabras de su secretario general Antoni Gutiérrez, "apostar por una clara opción de partido". Destaca en las listas la ausencia ya conocida de Josep Benet, que en las autonómicas de 1980 era el candidato a la presidencia de la Generalitat.

La candidatura por Barcelona está encabezada por Antoni Gutiérrez. Joan Oloriz, responsable político dé Gerona, encabeza la candidatura de esta provincia; Matías Vives, economista y asesor de la Unió de Pagesos, la de Tarragona; y Salvador Jové, ingeniero agrónomo, la de Lérida.