Jimmy Connors, sin su ambición tradicional, fue sorprendentemente eliminado por Tom Gullikson

El Gran Premio de Madrid de tenis se quedó sin uno de sus pilares. El estadounidense Jimmy Connors fue eliminado por su compatriota Tom Gullikson en un partido extraño en el que le faltó su ambición tradicional. Connors, rodeado de la frustración del público, perdió por 4-6,7-5 y 6-3. John McEnroe (EE UU) fue más eficaz y ganó al sueco Joakim Nystrom por 6-2 y 6-4. Hoy se disputarán los cuartos de final: McEnroe se enfrentará a Scanlon (EE UU); Gerulaitis (EE UU), a Gómez (Ecuador), (TVE, por la segunda cadena, a partir de las 15.30 horas); Smid (Checoslovaquia), a Tom Gullikson, y Jarryd (Suecia), a Kevin Curren (Suráfrica). A excepción de Connors, todos los cabezas de serie se han clasificado para los cuartos de final.

Jimmy Connors recogió sus raquetas, su bolsa y su toalla y se retiró a los vestuarios dejando a los espectadores del Pabellón del Real Madrid en un estado de frustración. La final Connors-McEnroe, tan deseada por los amantes del tenis, no se producirá en Madrid porque a un hombre modesto y que ya está cerca de la retirada se le ocurrió no rendirse ante el más poderoso y luchar hasta el último momento. Tom Gullikson fue encorajinado por el público cuando iba por detrás en el marcador en los dos primeros sets. Luego, su victoria fue aplaudida, pero en la mente de muchos espectadores estaba la pregunta de por qué a este jugador se le ocurrió ganar a Connors en Madrid, victoria que no había logrado desde 1979.El partido, sin embargo, no podía haber empezado mejor para Connors. Con su espíritu ofensivo de siempre, Jimbo ganó el primer set por 6-4 y con mucha facilidad. Esa fue su desgracia. En la segunda manga se relajó, pensando que a Gullikson le sucedería lo mismo ante el historial tenístico que tenía delante. Pero Tom apretó el ritmo, rompió el servicio de Connors y se colocó con 3-0 a su favor. Jimmy logró igualar, pero sin entrar en juego. En un momento crucial, con 6-5 a favor de Tom Gullikson en el marcador, Connors sirvió mal, no arriesgó con su habitual juego agresivo y perdió su servicio y el set.

En la tercera manga, Connors mantuvo su frustrante abulia. El público comenzaba a entrever el desastre. Algún mal pensado dejaba caer en la grada la idea de que Connors tenía prisa por marcharse. De hecho, Connors no apuraba los minutos de descanso y se limpiaba el sudor con la toalla sin sentarse. Su segundo servicio seguía sin casi solución de continuidad al primero fallado. Sus golpes carecían de precisión y, pese a que el público se mordía las uñas para poder aplaudirle, no pudo hacerlo más que en un par de ocasiones. Tom, mientras tanto, se había colocado con 4-1 a su favor. Con un juego desde el fondo cuando servía Connors y aproximaciones a la red cuando lo hacía él, Tom Gullikson fue arañando punto a punto su victoria más importante del año. Tom superó en el sexto juego el miedo a ganar que sufre todo tenista no acostumbrado a vencer y, aunque desaprovechó dos pelotas de partido -una con 5-3 y servicio de Connors y otra con su saque-, no dejó pasar la tercera.

McEnroe, desconfiado

John McEnroe vio los últimos instantes de la derrota de Connors desde la entrada de vestuarios y salió a la pista escarmentado. McEnroe tenía enfrente al sueco Joakim Nystrom, que, a sus 21 años, está considerado como el tercer mejor jugador de Suecia, tras Mats Wilander y Anders Jarryd. McEnroe atacó desde el primer momento para evitar cualquier problema. Con la ventaja sobre Connors de poseer un excelente primer servicio que le permite ganar puntos, McEnroe se asentó inmediatamente en la pista y tomó la iniciativa. El sueco Nystrom, que apenas abandonaba el fondo, perdió el servicio en el quinto y séptimo juego del primer set. McEnroe le rompía el habitual ritmo monótono sueco con bolas largas o dejadas pícaras.El segundo set fue similar, aunque a McEnroe le bastó romper el servicio del sueco en el primer juego. McEnroe, sin embargo, tuvo serios problemas con el público. El estadounidense fue abucheado cada vez que protestaba una decisión, pedía silencio o se quedaba parado mirando una bola dudosa. En varias de sus protestas McEnroe tenía razón ,sobre todo, al pedir silencio en los pasillos y solicitar que no se utilizasen flashes.

Los favoritos y cabezas de serie tuvieron ayer una fácil jornada. El sueco Anders Jarryd, que aún no ha conseguido captar la filosofía del tenis en pista rápida, venció al mejor jugador de raza negra de Estados Unidos, Chip Hooper, por 6-3 y 7-5.

Bill Scanlon acabó rápidamente con el alemán Westphal. Scanlon, con mucha más experiencia y sabiduria, colocó una trampa en su juego que Westphal no fue capaz de superar. El alemán nunca llegó a coger el ritmo, y perdió por 6-2 y 6-4.

Andrés Gómez apenas pudo entrar enjuego ante el actor Van Patten. Gómez se limitó a colocar las bolas en la pista, con su poderoso drive, mientras Van Patten gesticulaba continuamente en sus golpes mientras gesticulaba de cara al público para salvar su imagen de actor-tenista destruida por Gómez. Gómez se impuso por 6-2 y 6-4.

Otro recital de calidad fue el del checoslovaco Tomas Smid, que derrotó al correoso australiano Drewrett por 6-2 y 6-2. Smid está fuerte física y mentalmente, capacitado para ganar a cualquiera de los grandes.

La derrota de Jarryd y Simonsson endobles fue sorprendente. Tanto que la mayoría de los jugadores, que estaban descansando en los vestuarios, se asomaron a la pista para, entre sonrisas, seguir el final del partido. Meyer y Pate son dos jugadores mediocres. Meyer finalizó 1983 en el puesto 193 y Pate en el 130. Simonsson y Jarryd simplemente no lograron tomarse en serio el partido. Perdieron por 6-3, 4-6 y 7-6 (7-4), en un intercambio de errores, impropios de la pareja ganadora del último Roland Garros. Gunthardt y Taroczy se impusieron, por su parte, a Tim y Tom Gullikson por 6-2 y 63.

Programa para hoy

Hoy se disputarán los cuartos de final, cuyo emparejamiento queda así: McEnroe-Scanlon, Curren-Jarryd, Gómez-Gerulaitis y Gullikson-Smid. De los cuatro partidos, dos pueden ser considerados, a priori, como excepcionales.McEnroe y Scanlon mantienen un duelo personal desde hace años. En el Open de Estados Unidos, Scanlon derrotó a McEnroe en un gran encuentro. Gómez y Gerulaitis son dos artistas del tenis, muy irregulares pero capaces de lo mejor.

El orden de juego para hoy es el siguiente: a las 9.00 horas, Edwards-Visser contra Buenhing Taygan; Curren-Jarryd; Curren-Denton contra H. Gunthardt-Taroczy; Gerulaitis-Gómez. En la sesión vespertina, a partir de las 18.00, McEnroe-Scanlon; Smid-Tom Gullikson y M. Gunthardt-Sundstrom contra Meyer-Pate.