La victoria de Gary Hart provoca un vuelco en la carrera demócrata a la presidencia de EE UU

La batalla por la candidatura demócrata a la presidencia de Estados Unidos sufrió un cambio espectacular en la madrugada de ayer con la inesperada victoria del senador Gary Hart en las elecciones primarias celebradas en el Estado de New Hampshire.Contra todas las previsiones, Hart obtuvo el 40% de los votos mientras el favorito inicial, el ex vicepresidente demócrata Walter Mondale, sólo consiguió el 29%. Por su parte, el senador y ex astronauta Jonh Glenn se situó en el tercer puesto, alcanzando el 13%.

Hart, de 47 años y senador por el Estado de Colorado desde 1974, se presenta a las elecciones como el hombre de las nuevas ideas dentro del Partido Demócrata.

Es partidario de la congelación de las armas nucleares, pero no ha hecho de ello el tema central de su campaña electoral. Como la mayor parte de sus rivales, se ha comprometido a negociar con la Unión Soviética, condena la política de Ronald Reagan en América Central y se opone a la fabricación de los nuevos misiles intercontinentales MX.

Gary Hart no quiere definirse en términos generales como conservador o liberal y afirma buscar "una tercera vía entre la izquierda y la derecha". "Los norteamericanos desean ir hacia el futuro y no regresar al pasado", afirmó Hart tras su victoria en New Hampshire. Mondale, por su parte, señaló: "La campaña sólo ha comenzado. Ganaré la designación demócrata".

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