El alemán occidental Angeler rompió en biatlón con la hegemonía de soviéticos y alemanes orientales
Los Juegos de Sarajevo pasarán a la historia olímpica invernal como los más trastocados en su programación alpina de las 14 ediciones celebradas. Dentro del calendario incógnita de cada día (pues las condiciones meteorológicas parece que no mejorarán hasta mañana) las últimas decisiones oficiales indican que hoy, hipotéticamente, dado el temporal aún existente, se podría disputar el descenso masculino. El femenino, suspendido ayer, se ha trasladado al lunes, en lugar de la primer manga del eslalon gigante. En las dos únicas finales de ayer, aunque la RDA dominó con sus dos equipos el bobs a dos, por delante de los modelos soviéticos, perdió en biatlón ante el alemán occidental Angeler.
El esquí alpino, atracción máxima de los Juegos Olímpicos invernales, no está precisamente de suerte en Sarajevo, que parece sufrir una extraña maldición por las ausencias de Ingemar Stenmark, Hanni Wenzel y Marc Girardelli. La me teorología parece haberse aliado con las restantes modalidades, algunas de una espectacularidad y riesgo impresionantes, para adquirir el protagonismo y dejar al rey en una larga vía muerta.El temporal de nieve que afecta a toda Yugoslavia y que ha dejado incomunicados bastantes lugares del país, sólo ha respetado los calificados deportes invernales de relleno, que aparte ya de sus cualidades intrínsecas están teniendo caracteres de hazaña, únicamente por resistir el calendario.
El caso más grave, sin embargo, continúa siendo el de Bjelasnica y el descenso masculino, pues tras dos suspensiones, ayer ni siquiera pudo haber entrenamiento para unos esquiadores que llevan tres días completamente parados.
500 metros de pista
Sólo pudieron esquiar unos 500 metros por la parte baja de la pista que está casi normal, pero fue imposible nuevamente en la de arriba, donde el viento era de 150 kilómetros por hora. Hoy, en caso de que se pudiera celebrar la prueba, tendría que haber un entrenamiento previo para que los participantes reconozcan una pista bastante diferente a la de días pasados, debido a la nieve 3, al viento. Los cuatro entrenamientos de los primeros días no han. servido, entonces, para nada, y si la competición se presentaba abierta a 11 hombres aspirante al triunfo, ahora con mucha más razón: Zurbriggen, Raeber, Cathemen y Mueller (Suiza), Klammer, Steiner, Hoeflehner y Resch (Austria), Johnson (Estados Unidos), Podborski y Brooker (Canadá), son los kamikaze de los descensos a mas de 100 kilómetros por hora, que deberán enfrentarse con una pista más técnica que difícil, pero en la que las nuevas curvas y toboganes formados por la nieve serán otro problema para resolver improvisando.
Un total de 540 hombres, ayudados por soldados, trabajan desde el jueves en Bjelasnica y contra el viento y la nieve, pero se han visto incapaces de contener a las fuerzas de la naturaleza.
En la misma ciudad de Sarajevo, donde ha caído más de un metro de nieve en dos días, la situación no está muy lejos del caos, pues no dan a basto las máquinas quitanieve y es bastante tercermundista ver a los miles de jóvenes estudiantes, trabajadores voluntarios, reclutados por el artículo dos para los juegos, quitar a paladas lo que pueden.
Como consecuencia, los transportes, al margen ya de la relativa lejanía de los escenarios de las pruebas y del nema problema, habitual yugoslavo, son de una lentitud sintomática: Si los problemas metorológicos continuan un poco más, cosa que parece no ser así según las últimas previsiones, da la sensación de que la organización de Sarajevo, aceptable hasta ahora, se verá completamente desbordada.
Aunque se desmintió inmediatamente, se rumoreó un posible alargamiento de las fechas de los Juegos, algo inaudito por los problemas que causaría. Por el momento ya hay bastantes problemas y alterará con toda seguridad unos resultados iniciales, pues la preparación, tanto física como psicológica de los esquiadores se va a ver afectada sensiblemente con tanto cambio.
Nuevo triunfo militar
El biatlón sobre 20 kilómetros, la prueba más larga de esta modalidad que combina el esquí de fondo y el tiro con carabina, volvió a ser un triunfo militar, esta vez tan basado en la eficacia en los disparos como en el esquí.
El soldado alemán occidental Peter Angeler, se impuso a los estudiantes Roetsch, alemán oriental, y Kvalfoss, noruego. Angeler, que cumplirá los 25 años en julio, mide 1,77 metros y pesa 72 kilos, fue ya el ganador de la Copa del Mundo de su especialidad en 1983 y va líder en la actual, pero sólo había sido el 27 en los Juegos de Lake Placid-80.
Su eficacia en el tiro le dio ayer el triunfo, pues aunque también hizo el mejor tiempo en los 20 kilómetros sólo tuvo una penalización por dos únicos disparos fallados de los 20 efectuados a blancos de cuatro y 11 centímetros, alternativamente, desde posición tendido y de pie, a los 5, 12,2, 8,6 y 17,5 kilómetros.
Roetsch falló tres y Kvalfoss cinco. La gran sorpresa fue el francés Mougel, cuarto, que superó al alemán oriental Ullrich, segundo en Lake Placid y ganador de los 10 kilómetros, que aquí en Sarajevo se disputarán el martes.
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