Un gol de Santillana salvó al Real Madrid
El Real Madrid, pese a clasificarse para los cuartos de final, gracias al oportuno gol de Santillana, ofreció anoche una pobre impresión de juego e inspiración ante el Barcelona Atlétic. El líder de la Primera División demostró ignorar o ser incapaz de poner en juego las más elementales ideas del fútbol. La clasificación del Real Madrid, más que por méritos propios, fue fruto de la inocencia y el miedo inicial del equipo filial del Barcelona, defectos que no olvidó hasta bien entrada la segunda parte.
El conjunto madridista quiso convertir el partido en un mero entrenamiento. Para ello encontró facilidades de un Barcelona Atlétic cohibido, temeroso y atrincherado en su área defensiva. El conjunto madridista no tuvo entonces problemas para acercarse a la portería de Covelo, pero sin demasiado peligro.
Las ocasiones de gol de uno y otro equipo se repartieron por igual. La oportunidad más clara de gol estuvo en las botas de López, a los 60 minutos, pero no acertó en el remate. La otra cara de la moneda fue el remate de cabeza de Suntillana, que salvó la eliminatoria.
El Barcelona Atlétic llegó a tutear en bastantes ocasiones a todo un líder de Primera División, sobre todo en la segunda parte. Su juego, especialmente en el centro del campo, fue más brillante que el del Real Madrid. No hubiera sido sorpresa alguna que el equipo azulgrana hubiese eliminado al blanco. Bien se puede decir que el Real Madrid tuvo a la fortuna como fiel compañera y mejor aliada para pasar a los cuartos de final de la Copa del Rey.
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