El Instituto de Crédito Oficial obtuvo unos beneficios de 1.600 millones de pesetas
Los resultados provisionales del Instituto de Crédito Oficial (ICO), antes de efectuar las correspondientes correcciones a las partidas de distintos créditos a la exportación, arrojan una notable recuperación, con 1.605 millones de pesetas de superávit, frente a pérdidas superiores a los 4.600 millones un año antes. El Consejo de Ministros decidirá, en una fecha próxima, conceder autorización a que los bancos oriciales, que dependen del ICO, puedan establecer una elevación sustancial de los tipos de interés de las operaciones crediticias no sujetas a regulación estricta de la Administración, y que se pretende que en 1984 se establezca en la banda entre el 11% y el 17%.
Los bancos públicos -Hipotecarío, Local, Industrial y Agrícolay el propio Instituto de Crédito Oficial obtuvieron durante 1983 una mejora notable de sus resultados de explotación, a pesar de las importantes dotaciones para provisión de morosos que han efectuado todas las instituciones durante el pasado año. El ICO tiene declarados, provisionalmente, 1.605 millones de pesetas de beneficio neto, obtenidos básicamente gracias a la subvención de créditos a la exportación. Los productos ordinarios del ICO -suma del margen financiero y de los ingresos logrados por otros productos ordinarios- se situaron en 13.630 millones de pesetas, frente a 9.074 millones de un año antes. Este incremento se la logrado a pesar del fuerte aumento de los intereses de las dotaciones del Tesoro y de los recursos obtenidos a precios de mercado, especialmente el endeudamiento exterior del ICO.Los gastos de explotación en una entidad tan reducida como es el propio Instituto de Crédito Oficial apenas tienen significación (360 millones de pesetas, frente a 464 millones en 1982). El capítulo más espectacular de la cuenta de resultados es el de las resultados extraordinarios, en el que se computan las diferencias de cambios y otras posibles consecuciones ajenas al ejercicio. El cómputo de este epígrafe del balance arroja unas pérdidas de 11.665 millones de pesetas, desglosados en unos pagos superiores a los 19.000 millones de pesetas, como mayores costes del endeudamiento exterior del ICO, y unos ingresos cifrados en 7.500 millones de pesetas; derivados de la subvención que el Tesoro hace a los créditos a la expor tación por encima de los 70.000 millones de pesetas presupuestados en 1983.
Hacia la descentralización
Los presidentes del Banco de Crédito Agrícola, Hipotecario de España y Crédito Local, José Barea, Antonio Torrero y Andreu Abelló, respectivamente, al margen de presentar una panorámica favorable de la evolución del ejercicio pasado en función de los resultados obtenidos, mostraron especial énfasis en señalar el caráctar descentralizador que se quiere dar a estas instituciones financieras y, sobre todo, la mayor capacidad que están teniendo de independizarse financieramente de los circuitos privilegiados de crédito.En este sentido, señalaron que el objetivo que persiguen es lograr una mayor implantación en el mercado de captación de recursos y, por tanto, de actividad libre no sujeta a las rigidices que les impone el hecho de ser bancos oficiales con obligación de prestar dinero a sectores considerados esenciales por el Gobierno. La adecuación a las condiciones de mercado pasa por la elevación de los tipos de interés a los que pueden prestar sus recursos no sujetos a límites fijados por la Administración, como es el caso del sector naval, en el que los préstamos son al 8%. Así, el ICO ha solicitado al Gobierno que se acepte una banda de tipos de interés que oscile entre el 11% y el 17%.
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