González viajará a principios de febrero a Arabia Saudi y Jordania

El presidente del Gobierno español, Felipe González, realizará a principios de febrero su primer viaje a Oriente Próximo, Arabia Saudí y Jordania, para mantener conversaciones sobre la situación en esa región y en el Sáhara occidental, sondear acaso a sus interlocutores sobre su reacción ante el eventual establecimiento de relaciones entre Madrid y Tel Aviv y explorar cauces de cooperación financiera, según fuentes diplomáticas de absoluta solvencia.La visita al reino saudí, prevista del 5 al 7 de febrero, se celebrará en medio de una apretada agenda diplomática que obligará a González a desplazarse a Estrasburgo los días 30 y 31 de este mes para pronunciar un discurso en la sesión inaugural del Consejo de Europa y a viajar a Caracas el 2 del mes próximo para asistir a la toma de posesión del nuevo presidente socialdemócrata venezolano, Jaime Lusinchi.

El jefe del ejecutivo español fue invitado verbalmente a visitar Riad por el monarca Falid Ben Abdul Aziz el 7 de diciembre de 1982, durante un almuerzo privado ofrecido en La Zarzuela por el rey Juan Carlos I. Posteriormente, el ministro saudí de Defensa, príncipe Sultan Ben Abdul Aziz, concretó el proyecto de viaje durante su visita oficial a España a principios de octubre del pasado año.

Las 48 horas de estancia de González en Riad servirán, según las mencionadas fuentes diplomáticas, para "profundizar los contactos personales con el Rey y su séquito indispensables para conservar y desarrollar en el futuro el comercio con el país más rico y poderoso de Oriente. Próximo". No cabe, por tanto, esperar ningún resultado concreto espectacular del viaje a una capital con la que Madrid mantierte óptimas relaciones, gracias, en parte, a la amistad entre los soberanos Falid y Juan Carlos.

Al margen de conversaciones de carácter general sobre la conflictiva situación en la región, especialmente en Líbano, el jefe del Gabinete será, sin duda, interrogado por sus interlocutores acerca de las intenciones españolas sobre el establecimiento de relaciones diplomáticos con Israel, decisión que debe esperar el niomento "idóneo", según declaró el propio González en su conferencia de prensa celebrada la víspera de Nochebuena.

En octubre, Sultan Ben Abdul Aziz ya preguntó insistentemente al vicepresidente Alfonso Guerra sobre este tema y, aparentemente, sus temores fueron apaciguados cuando el número dos del ejecutivo español hizo observar al príncipe que el injustificado revuelo organizado en España se debía, en gran parte, a la reciente existencia de un activo lobby español projudío, mientras el grupo de presión proárabe era bastante más timorato.

El acercamiento hispano-israelí ha suscitado cierto malestar en los círculos gubernamentales de Riad, hasta el punto de que en una breve y escasamente significativa represalia por la apertura, el pasado verano, de la línea aérea entre Madrid y Tel Aviv, las autoridades de la aviación civil saudí prohibieron durante algunas semanas a la compañia Iberia prolongar su vuelo de Yeda hasta Abu Dhabi.

Temas económicos

Si, como parece probable, queda confirmada la presencia en Riad del ministro español de Economía y Hacienda, Miguel Boyer, la agenda de las conversaciones. bilaterales incluirá también la posible concesión de créditos a largo plazo y a bajos intereses al Reino de España y la financiación por Arabia Saudí de proyectos de cooperación españoles en países árabes como Marruecos, Sudán, Somalia y Tunicia.La delegación española no tiene, en cambio, excesivo interés en evocar en Riad el suministro a España de crudos, regido por un contrato entre Hispanoil y Petromin que caduca el, 31 de diciembre de este año, y que la parte española ha dejado de cumplir de forma pactada al 100%, al haber bajado el consumo nacional de petróleo y al resultar más económica su adquisición en el mercado libre de Rotterdam o en otros países, según señalan fuentes del sector. A lo largo del año pasado, Arabia Saudí ha ido perdiendo su puesto de primer proveedor enegético de España para situarse ahora en tercer lugar, detrás de México e Iran.

La escala técnica en Animan, como presentan las fuentes diplomáticas la breve estancia de González en Jordania, y que aún está pendiente de una última confirmación, revestirá, en cambio, un carácter meramente político y permitirá al presidente español entrevistarse con el rey Hussein en un momento en que el monarca hachemita vuelve a asumir un papel de primera fila en Oriente Próximo. Tras su derrota militar en Trípoli por facciones prosirias, el líder de la Organización para la Liberación de Palestina, Yasir Arafat, parece dispuesto a reemprender el diálogo interrumpído en abril con Hussein con vistas a in.corporarse a una posible negociación de paz en tomo al plan propuesto en 1982 por Reagan.