El ayuntamiento comprara en enero mobiliario urbano para mejorar el aspecto de la ciudad

Una reciente exposición sobre nuevos diseños de mobiliario urbano, clausurada el lunes en el Cuartel del Conde Duque, ha permitido a los visitantes atisbar la fisonomía alegre y funcional que puede implantarse en las calles madrileñas a partir del próximo año. Aseos públicos autómaticos, con música y aire acondicionado, motos especiales con dispositivos basculantes para recoger los excrementos de los canes, marquesinas de autobuses con voladizos de cristal, señales de aparcamiento con indicación del número de plazas libres, paneles informativos electrónicos para facilitar mensajes puntuales, papeleras, semáforos, bancos, juegos infantiles, todo está concebido para ofrecer un máximo de información al ciudadano y hacer de la calle un lugar seguro y agradable.

La exposición recoge los diseños de nueve empresas especializadas en el sector del mobiliario urbano, que concurren al concurso público organizado por el Ayuntamiento de Madrid. El próximo 4 de enero se procederá a la apertura de las plicas y a la elección de los elementos que se consideren más idóneos. Juan Barranco, primer teniente de alcalde, y Jesús Espelosín, concejal de urbanismo e infraestructuras básicas, visitaron la exposición el último día y se declararon admirados de la inventiva de los diseñadores. Barranco, como los representantes de las empresas concurrentes, reconoció que la señalización, los bancos, las farolas madrileñas, y, en general, todo el mobiliario público, está anticuado, sucio y degradado.Por estos motivos, una de las claúsulas del concurso en que más hincapié se ha hecho es la de los servicios de mantenimiento, para que las empresas que ganen el concurso -se pueden elegir elementos de diferentes candidatos- garanticen la rapidez en la reposición de los objetos dañados por el paso del tiempo o por el comportamiento antisocial de los ciudadanos.

La filosoria de estas compañías es que cualquier cristal roto debe reponerse inmediatamente, no sólo para que la fisonomía urbana no se deteriore, sino porque la experiencia ha demostrado que ésta es la mejor manera de ir acabando con las prácticas de los gamberros. La gente tiende a respetar el mobiliario que se ve que está cuidado.

Aseos automáticos

El Ayuntamiento parte, en principio, de condiciones económicas favorables. Varias de las empresas concurrentes han ofertado instalar el mobiliario de forma gratuita, a cambio de la explotación de los espacios previstos para colocar publicidad.Uno de los elementos que más llamaron la atención de los visitantes fue un modelo de aseo automático. La introducción de unas monedas pone en marcha el mecanismo de apertura de la puerta. Dentro, en un espacio reducido ,pero suficiente para el servicio requerido, se encuentran la taza de aseo, un lavamanos y papel higiénico. La instalación se completa con música ambiental, aire acondicionado y un sistema de ventila ción que permite la eliminación de malos olores. El tiempo máximo de permanencia en el habitáculo es de 15 minutos." Terminado el servicio, la taza bascula hacia atrás y queda en los brazos metálicos de una serie de artilugios que la limpian y desinfectan. Un sistema hidraúlico sensible al peso impide que el servicio pueda ser utilizado por niños que no entren acompañados por una persona mayor. La eliminación de los residuos se efectúa por la red de al cantarillado, a la que la cabina automática debe estar conectada.

Las señales de información abarcan una serie muy amplia de modelos, todos con características comunes, como son el disponer de luminosidad interna que facilita la lectura desde puntos distantes, ayuda a que las calles estén más iluminadas y las hace, por tanto, más seguras. Paneles electrónicos que serán controlados desde una oficina municipal -en caso de que sean adquiridos por el Ayuntamiento- facilitan información actualizada sobre el estado del tráfico, acontecimientos y exposiciones.