Radiotelevisión Española todavía no ha adscrito plantillas y sigue ignorando el coste real de los programas que emite

La oposición reprocha a los socialistas ignorar todavía datos tan fundamentales como el costo real de un programa, no haber adscrito las plantillas, e incrementar los gastos de personal en algo más del 20%. La racionalización de la gestión es todavía un proyecto: RTVE invertirá 1.534 millones de pesetas, entre 1983 y 1987, para mecanizar e informatizar la gestión de todas las áreas. Mientras, la televisión socialista, en contra de lo prometido por J. M. Calviño, tendrá más publicidad y más cara.

La oposición parlamentaria sigue preguntando, al cumplirse un año del mandato de Calviño, por lo mismo que antes preguntaban los socialistas desde la oposición y que todavía no tiene respuestas. ¿Cuánto cuesta un programa de TVE? ¿Por qué el capítulo de personal de RTVE se incrementa para el presupuesto del próximo año en algo más del 20%? Los gastos de personal, capítulo primero, ascienden a 38.141 millones de pesetas, el 63,7% del presupuesto de RTVE: 59.000 millones de pesetas y una plantilla de 11.164 trabajadores. ¿Por qué no se han adscrito las plantillas definitivas de RTVE y de sus sociedades? ¿Por qué figura una partida de amortizaciones de aproximadamente 700 millones de pesetas si todavía no existe un inventario completo de los bienes de RTVE? Preguntas que fueron planteadas en el Congreso los días 19 y 26 de octubre.El diputado Iñigo Aguirre, del PNV, fue más allá y nadie pudo contestarle, en la comisión de Control que preside Carmen Llorca, a preguntas fundamentales como éstas: "¿Cuál el el costo de la hora de emisión de TVE. para ambas cadenas? Hora de emisión, no hora de programación. ¿Cuál es la ratio hora de producción propia de RTVE y puesto de trabajo fijo en plantilla. Y, por otro lado, ¿cuál es la productividad, en miles de pesetas, por cada miembro de plantilla de TVE?"

Falta de transparencia

La primera valoración que se ha hecho del presupuesto que Calviño presentó para el próximo año -con un incremento del 17,6% respecto al actual- es que su estructura- es la misma que confeccionaron anteriores directores generales.

Un consejero socialista, el catalán Eugeni Giralt, destacado defensor de Calviño, así lo reconoció en el Congreso: "Es evidente ( ... ) que la estructura actual es muy insuficiente para un conocimiento detallado de las tareas que tenemos encomendadas. ¿Por qué? Porque el gasto mayor, excepto gastos de personal, que es el gasto de la producción, viene reflejado en una partida que realmente hay que ser un lince para saber qué es lo que hay aquí dentro, que es dentro del capítulo VII, Gastos diversos, partida 7.7, otros gastos, incluída la programación ( ... ) Nos parece que esto es de difícil comprensión y, por tanto, que hay que hacer mucho más transparentes estas partidas".

El director general de RTVE se defendió, en la Comisión de Presupuestos con estos argumentos: uno de sus objetivos es "pasar de una técnica amanuense en la contabilidad y en la gestión, con una simple contabilidad presupuestaria llevada a mano y con cifras globales, a una gestión compleja de informatización de ese medio. ( ... ) Porque, lamentablemente, no tenemos todavía en RTVE una contabilidad de costos; no tenemos más que una de terminación aproximativa de los in-put directos. No hay manera de determinar los in-put indirectos y, por tanto llegar a una conclusión ajustada del costo real de los Servicios Informativos de la Televisión pública es todavía pasión inútil". También dijo Calviño que la contabilidad analítica se implantará el próximo año; que el crecimiento del capítulo de personal se ha reducido respecto a 1981 y 1982, cuyos índices eran de 23 y 24%. Se reconocen, como logros de Calviño, haber establecido un sistema objetivo para ingresar en las plantillas de RTVE, mediante oposiciones y haber mejorado la gestión del control del gasto. El organigrama supone una reducción de 176 cargos y un ahorro anual de 106 millones de pesetas pero, entre sus defectos, hay una estructura en TVE que se considera muy poco racional y eficaz, especialmente en la dirección de Programas de R. Gómez Redondo que, junto a la dirección de Informativos, son órganos paralelos al director de TVE.

El Ente Público no ha descentralizado el fuerte poder y control con que somete a las tres sociedades; su aparato burocrático asfixia y ralentiza el ritmo de producción de programas. Algunos socialistas creen, por ello, que la imagen de buen gestor de Calviño es "un cuento chino" y que la gestión y racionalización sólo son un proyecto.

Planes de Calviño

Calviño presentará al Consejo de Administración dos importantes documentos para la futura gestión: el Plan estratégico y el Plan Integral de Mecanización e Informatización (PIMI) de RTVE. Han sido elaborados por el Gabinete de Planificación, que dirige Ricardo Visedo.

RTVE invertirá. entre 1983 y 1987 alrededor de 1.534 millones de pesetas para llevar a cabo su mecanización e informatización total, el PIMI, que permitirá implantar una contabilidad analítica; planificar inversiones, recursos humanos y técnicos en la producción; controlar la asistencia al trabajo de sus empleados; tener información y control para contestar a aquellas preguntas que hoy no tienen respuesta.

Cinco empresas trabajan ya en el PIMI de RTVE: Arthur Andersen (sistema de contabilidad, general y analítica y control presupuestario); Sofemasa (en la gerencia de Publicidad de RTVE), Entel (desarrollo de un sistema secundario para viajes y dietas); Eria (sistema del Gabinete de Investigación de Audiencia) y SGI (gestión de personal).

El problema está en saber si la informática es ese deus ex macchina que va a resolver todos los males de RTVE o si la omnipotencia del PIMI se estrellará contra la casa. Una empresa, como dice un directivo, donde no hay empresarios, con unos rendimientos y estado de situación muy por debajo de toda previsión: "Aquí", dice otro directivo, "se dan las tres condiciones para que los empleados se sientan satisfechos en su trabajo: gran estabilidad en el empleo (son contados los despidos en RTVE, en cuya historia abunda todo tipo de irregularidades), buena remuneración (el, sueldo medio de un trabajador de RTVE asciende a 1.600.000 pesetas, considerado como uno de los mas altos del país, sino el más alto) y un trabajo entretenido, como es la producción de programas". Sin embargo, la mayoría de los empleados no parece que se divierta mucho ni esté muy satisfecha.

Mientras tanto Calviño no ha cumplido algunas de sus triunfales promesas: reducir la publicidad e incluso lograr que un día a la semana no se emitan anuncios. La televisión socialista tendrá más publicidad y más cara.