Aplazadas las medidas contra empleadas de hogar marroquíes en Ceuta

La delegación del Gobierno en Ceuta ha aplazado por 15 días la aplicación de las medidas de control anunciadas para las empleadas del hogar marroquíes que prestan ilegalmente sus servicios en la ciudad norteafricana. Unas medidas que, en principio, deberían de haberse iniciado ayer, jornada festiva por otra parte, en la que la normalidad fue la tónica tanto en la ciudad como en su frontera con Marruecos.

En los distintos medios ciudadanos continúa el temor a las represalias marroquíes ante estas medidas, que pretenden erradicar la explotación ilegal de unas 500 empleadas del hogar que diariamente atraviesan la frontera ceutí de El Tarajal para trabajar en 180 hogares de la ciudad, según anunció la pasada semana la delegación del Gobierno.

En definitiva, lo que las autoridades españolas pretenden es que estas trabajadoras tengan sus pasaportes respectivos, concedidos por las autoridades de su país, que les permitirían acceder al mercado de trabajo de la ciudad en condiciones legales. Este hecho ha influido para que la Delegación del Gobierno haya conferido una prórroga de 15 días con el objeto de que las interesadas puedan cumplimentar administrativamente en su país la petición del documento.

La situación, que ha levantado airadas críticas en Marruecos, ha entrado en compás de espera. Sin embargo, este nuevo caso puede ser flexibilizado por las autoridades españolas, ya que han indicado también que estas medidas serán aplicadas gradualmente, cuestión que ha obtenido el beneplácito de las autoridades del país vecino.