Un joven de 20 años mató a hachazos a una anciana de 72 y anuncio su crimen en un bar

Una mujer de 72 años, Carmen Cristóbal Solano, fue asesinada a hachazos, a últimas horas de la noche del martes, en Lodosa (Navarra). El presunto homicida, el joven de 20 años Javier Fernández Santos, fue detenido, minutos después de cometido el hecho, en un bar cercano al lugar del crimen, adonde había acudido a tomar algo antes de que le detuvieran, según confesó él mismo al alguacil municipal de esta población.Si bien se desconocen hasta el momento los móviles de este asesinato, vecinos de los afectados aseguraron que las discusiones entre estas dos personas, que vivían solas en el mismo edificio, eran muy frecuentes.

Asimismo se afirmaba ayer que Javier Fernández Santos sufría crisis mentales habitualmente, lo que había obligado en alguna ocasión a su traslado en ambulancia a Pamplona, donde recibía atención médica.

El presunto autor del crimen fue detenido en el bar aludido, por la Guardia Civil de Lodosa, 15 minutos después de que se hubiera cometido el asesinato, cuando Javier Fernández se tomaba un vino y un pincho.

Al parecer, los hechos ocurrieron cuando Javier Fernández Santos -quien se había casado hace unos tres años, aunque actualmente se encontraba separado de su mujer y de sus dos hijos- bajó hacia las 21.00 horas a casa de su vecina, armado con un hacha.

A tomar unos vinos

Sin que se pueda precisar qué ocurrió en esos momentos, el supuesto homicida le asestó al menos tres golpes de hacha en la cabeza a la anciana, que cayó al suelo en medio de un gran charco de sangre.

Según ha declarado el alguacil del pueblo, Javier Fernández le comunicó hacia las 21.15 horas que había matado a una mujer, "pero no se lo digas todavía a la Guardia Civil, porque antes me voy a tomar unos pinchos".

El alguacil le preguntó que a quién había matado, y éste le contestó que a su vecina. Inmediatamente el empleado municipal acudió a casa del juez de paz y desde allí se notificó el suceso a la Guardia Civil, así como al médico del pueblo.

Al llegar al lugar en el que se produjeron los hechos, la Guardia Civil encontró a Carmen Cristóbal tendida en el suelo de su habitación en medio de un charco de sangre, aunque todavía respiraba. Trasladada inmediatamente en ambulancia al hospital de Navarra, la anciana falleció al poco tiempo.

Mientras, la Guardia Civil acudía al bar donde se encontraba Javier Fernández, quien, tras terminar de beber el vaso de vino, rompió el recipiente contra la barra, enfrentándose a los guardias, pero éstos le redujeron rápidamente y le esposaron. El joven, que se encontraba en paro y que hacía dos semanas había sido detenido por amenazar con una navaja a varias personas en el pueblo, fue trasladado ayer a la prisión provincial de Pamplona, donde se encuentra internado tras haberse practicado las diligencias judiciales por el juez de instrucción de Estella, quien ha decretado su ingreso provisional en este recinto penitenciario.