Las 124 compañías que integran la Asociación Internacional de Transporte Aéreo perderán este año unos 180.000 millones de pesetas

Las 124 compañías que integran la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) -105 en calidad de miembros activos y 19 como asociados- perderán este año unos 1.200 millones de dólares (180.000 millones de pesetas), según estimaciones que recoge el informe anual de la organización.El documento, hecho público hoy en Ginebra y presentado simultáneamente en Nueva Delhi, donde tiene lugar la asamblea general de IATA, hace particular hincapié en, las dificultades monetarias de las distintas compañías, los problemas de tesorería y los impedimentos de muy diversa índole que dificultan la transferencia de divisas.

A pesar de los problemas que conoce el transporte aéreo (guerra de tarifas, proteccionismo, nacional, trabas administrativas y competencia, en muchos casos desleal), la IATA continúa siendo un soporte "fundamental" para los intercambios, el comercio y el turismo mundiales. Gracias a, los mecanismos de compensación, y sin requisitos mayores, IATA llegó a transportar, dice el informe, 50 millones de pasajeros de un país a otro en 1982, lo que supone un aumento del 1% con respecto al año anterior y, en volumen, el 80% del total de los vuelos internacionales regulares.

Previsiones para el futuro

El flete, en cambio, disminuyó en la misma proporción (1 %). Mientras el transporte internacional de mercancías crecía en algo menos de un 3%, sobre las líneas interiores regulares el flete acusaba una baja del 7%, según IATA, que, refiriéndose al tráfico postal, expresado en toneladas por kilómetro, cifra el ¡aumento en un 3,7% para el tráfico internacional.En cuanto a las previsiones, IATA presagia un incremento del número de pasajeros del orden del 2% para 1983 y del 5% para 1984 y 1985, a condición de que la reactivación económica se confirme. Los fletes, que durante el primer semestre del año en curso han progresado en, aproximadamente, un 5%, podrían situarse a finales del año en sólo un 4%, pero el crecimiento sería ligeramente superior en años sucesivos, en torno a un 6% en el período 1984-1985.

El informe de IATA se hace también eco de "la oleada de actos desastrosos de piratería aérea", y afirma que son necesarios "una disciplina de hierro, servicios de seguridad y vigilancia y medidas severas por parte de los Gobiernos", a fin de evitar el secuestro de los aviones o los actos de violencia contra las aeronaves civiles.

En el capítulo financiero el documento constata una pérdida de explotación de 200 millones de dólares en 1982, a la que añade 1.600 millones de dólares más en concepto de deuda e intereses a pagar.

Sin embargo, las previsiones son optimistas para 1983. La IATA prevé, por primera vez desde 1979, un beneficio de unos 500 millones de dólares.

Las ganancias, concluye el informe, serán incluso mayores en 1984 y 1985, a condición de que aumenten los coeficientes de ocupación de los aviones, que en 1982 fue de 61,7% lo que equivale a una disminución del 0,5% con relación a 1981. Los cálculos de IATA para el año en curso dejan suponer un aumento del tráfico de viajeros de un 2%.