El contrato TV3-Barça podrá rescindirse si se emiten noticias que atenten contra el club

El contrato entre el FC Barcelona y el tercer canal de televisión catalán, TV3, firmado el miércoles, tras algunas leves modificaciones, mantiene una cláusula en la que se autoriza al club a rescindir el acuerdo si TV3 emite "informaciones que no se ajusten a la verdad o realidad o puedan atentar contra la institución o sus integrantes y no se rectifica de inmediato a solicitud del F C Barcelona".Ayer, los integrantes del Consejo de Administración de la Corporación Catalana de Radio y Televisión (RTVC) recibieron un documento en el que se reproducían los párrafos del precontrato negociado entre el Barcelona y TV3 y las modificaciones introducidas después de que el consejo diera un mandato, el pasado lunes, al director general para que renegociara varios términos del mismo que afectaban a la gestión económica -introduciendo una cierta privatización de la gestión en TV3- y a la libertad de expresión. Las variaciones introducidas han sido calificadas por algún consejero de "únicamente semánticas", mientras otros consideran que la semántica tiene una enorme repercusión en Derecho. Según el citado documento, en la introducción del contrato desaparece la expresión "explotar conjuntamente" y se sustituye por la de "ambas partes han llegado a un acuerdo a fin y efecto de participar en los beneficios que se deriven de la emisión de los actos televisados del F C Barcelona". Del artículo primero desaparece: "F C Barcelona y TV3 explotarán conjuntamente" y, en su lugar, puede leerse "F C Barcelona y TV3 se ponen de acuerdo". En el artículo quinto, cuando se habla de la autorización de la Federación Catalana de Fútbol, seañade que "el Barcelona interpondrá sus buenos oficios con tal de obtener la autorización y, en caso necesario, la flexibilidad en sus horarios de forma conveniente". En el artículo noveno deja de mencionarse el término "coexploten" y aparece,el de "explotarán publicitariamente".

El artículo treceavo . que decía: "El F C Barcelona no acepta publicidad política ni cualquier otra que pueda atentar contra la moral, las buenas costumbres o que considere que puede ir en contra de sus intereses"- queda formulado de la siguiente manera: "La publicidad no será política y se atendrá al concepto general del decoro". Ya en el capítulo, que afecta plenamente a la libertad de expresión, en el artículo decimoséptimo, apartado B, donde se advertía que si "TV3, en cualquier programa da información falsa del F C Barcelona o si atenta contra la institución, sus intereses, su imagen o la de sus integrantes", el club tendría derecho de rescindir unilateralmente el contrato, de no mediar rectificación, se lee "Si TV3 en cualquier programa emite información del F C Barcelona que no se ajuste a la verdad o realidad o que puediese atentar contra la institución o sus integrantes y no fuera rectificada de inmediato a solicitud- del F C Barcelona, se rompería el contrato. Se respeta, sin embargo (tantmateix, en el original catalán), la libertad del informador de juzgar los acontecimientos del juego en cualquier deporte". En la última modificación se matiza las competencias de una comisión mixta entre TV3 y Barcelona que pasa a entender de la preparación de las emisiones del Barcelona y "cualquier tema con el presente contrato", cuando en el original se hablaba de la aprobación de tarifas publicitarias, elaborar programas, etcétera.

Reacciones

Ayer, el Partit Socialista Unificat de Catalunya (PSUC) difundió un comunicado de sus consejeros en TV3 en el que denuncian la firma de un contrato que contiene "algunas irregularidades". Al final, manifiestan que la consolidación del tercercanal posibilitará que en el futuro prevalezcan los intereses colectivos sobre actuaciones monopolísticas de las grandes empresas y entidades. Los consejeros del PSUC no habían decidido ayer la postura a tomar en la reunión del consejo del próximo lunes, aunque todo parece indicar que no tomarán una postura que lleve a la rescisión del contrato, a pesar de reconocer las irregilaridades del mismo. Los socialistas se reúnen hoy para estudiar las modificaciones introducidas. En este caso, es probable que su postura sea más radical por considerar que la nueva redaeción mantiene los mismos vicios del precontrato paralizado.