Granada Television ha invertido 200 millones de pesetas en su serie sobre la guerra civil
Dentro de la más pura tradición positivista, tan cara a la escuela británica de historiografía, The Spanish Civil War, serie televisiva en seis capítulos producida por Granada Televisión, propone una nueva aproximación audiovisual a un tema histórico que ha generado tantas imágenes como literatura. La Semana Internacional de Cine de Barcelona la ha presentado por primera vez ante un público español. El coste de la misma se acerca a los 200 millones de pesetas.
La proyección de esta serie dentro de la Semana responde a los intereses del certamen, cada vez más atento al fenómeno de la imagen en televisión y vídeo. Paradójicamente, esta serie no está contratada por Televisión Española."Nuestro deseo es explicarle a una audiencia internacional qué sucedió y qué significó la guerra civil española. Para hacerlo todo más comprensible hemos ordenado la narración por temas y no cronológicamente". Ése es el propósito explicitado por los directores John Blake y David Hart y por el asesor Ronald Fraser. "Mi libro Recuérdalo tu y recuérdaselo a otros está en el origen del proyecto. Rodando la serie hemos podido comprobar hasta qué punto la contienda es aun un hecho vivo, algo que existe en la memoria de las gentes. Nos ha interesado especialmente que hablaran personas no significadas de uno y otro bando, darle la palabra a los protagonistas y testigos anónimos. En realidad eran ellos quienes han mostrado una mayor necesidad de hablar, de manifestar sus opiniones". Quien así se expresa es Ronald Fraser, satisfecho de un trabajo que ha ocupado dos años y medio de su vida y que ahora se está comercializando en países como Italia, Finlandia, Australia, Bélgica y en algunos de América Latina.
El mayor interés de la serie, aparte del que se deriva de su repercusión pública, estriba en que recopila una serie de imágenes inéditas, que no habían vuelto a exhibirse desde el momento en que dejaron de ser alimento para la maquinaria de los noticiarios filmados.
Pasado dramático
Archivos cinematográficos del Berlín oriental, de alguna universidad norteamericana y de la casa Pathé, han facilitado esos fotogramas incunables e imprescindibles para un archivo del período 1936-39.Alguno de los testimonios, como el del periodista portugués Mario Neves sobre la matanza de Badajoz, son auténticamente sobrecogedores, como sobrecogedor y emocionante resulta el silencio de entomólogo con que el público de Barcelona ha acogido los mítines fascistas que, desde la pantalla y con su imborrable falsete, pronuncia en el filme Francisco Franco. Quizás sea ésa la mejor prueba de que un pasado dramático está en trance de ser superado sin que haga falta olvidarlo.
Como acostumbra a suceder en este tipo de producciones, The Spanish Civil War no investiga en las imágenes, si no que las utiliza para ilustrar un texto pre-existente, que impone su orden y sus necesidades.
Ésa es su limitación si de valores cinematogáficos hay que hablar, pero es una limitación disculpable si tenemos en cuenta que las filmaciones, en su gran mayoría, también fueron hechas con un espíritu instrumental.
Según sus autores, las conclusiones que se extraen de la visión completa de la serie son las de que la guerra civil supuso una gran desilusión para los dos bandos: para unos es la derrota y el exilio, el fracaso de su intento de crear una nueva sociedad; para los otros, la victoria equivale a ver traicionados sus ideales, ya que la España franquista nunca fué ni el olimpo fascista en que habían soñado ni la monarquía de democracia restringida que deseaban.
Los seis capítulos, distribuidos temáticamente, de títulos muy genéricos, son: Preludio de la tragedia, Revolución- Contrarrevolución y terror, Campo de batalla para idealistas, Franco y los nacionalistas, La Revolución y Victoria y derrota.
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