TVE invertirá 2.000 millones de pesetas en la regionalización de la red de difusión de programas

Fuentes de TVE estiman que la regionalización de Televisión Española sólo será posible con la inversión de aproximadamente 2.000 millones de pesetas en la infraestructura de la red de difusión, independientemente de la creación de nuevos centros regionales de producción y de la renovación de los existentes. La red de difusión de TVE tiene forma de estrella y está concebida al estilo de la infraestructura viaria de la Renfe: todo parte de Madrid y todo confluye a esta capital. De ahí que el reajuste que el Estado de las autonomías impone a TVE pasa por hacer regionalizable la red.

La primera cadena de TVE alcanza ya al 95%-97% de la población española y al 90% de su territorio; la segunda cadena cubre el 85%-87% de la población y el 70% del territorio español, según datos facilitados por Alberto Barragán, subdirector de explotación de la red.De todas formas, todavía hoy se solapan en algunas zonas las emisiones de distintas comunidades autónomas, precisamente porque la red se construyó sin tener en cuenta las necesidades de televisiones regionales, y mucho menos la estructura autonómica del Estado. Sucede esto especialmente en el País Vasco, cuyo centro de Bilbao inunda parte de Navarra y de la Rioja, y en Aragón, donde se reciben en parte de su territorio programas del centro de producción y emisión de Barcelona. Zaragoza, por ejemplo, sólo puede servirse de la segunda cadena de TVE cuando no la utiliza Cataluña.

Tampoco han desaparecido todas las zonas de sombra, a pesar de que las instituciones locales, desde pequeños ayuntamientos y comunidades de vecinos hasta diputaciones, han contribuído a costear la red de transmisores y repetidores y los accesos a los mismos. Así, la red de TVE en Navarra ha sido financiada íntegramente por la Diputación Foral.

La Rioja es probablemente la comunidad autónoma con mayores dificultades para que TVE la dote de un centro regional y de una red que cubra su territorio, ya que no cuenta con ninguna estación de radioenlaces. En otros casos existen serias dificultades para comunicar ciudades y provincias de una misma comunidad.

Así, dentro de Castilla-León, si se quiere transmitir un programa desde León a Zamora, la señal tiene que viajar primero a Valladolid, luego a Madrid, y desde esta capital bajar hasta Badajoz para subir a Cáceres, atravesar Salamanca y llegar a Zamora. Para evitar este largo viaje, que provoca deterioros de calidad en la señal, es necesario, dice Barragán, cerrar la red entre la estación de Matadeón (León) y Zamora. Asimismo, si se quiere transmitir un programa desde Valladolid a Soria, las señales tendrán que viajar primero a Madrid, subir por Aragón y llegar a Soria.

"Nadie pretende", prosigue el subdirector de explotación de la red, "regionalizar la segunda cadena, sino mantenerla y ampliarla como red nacional, con la posibilidad de hacerla regional en determinados momentos y en horas de gran audiencia. Es decir, que sea una cadena regionalizable. Se trata de adaptar en lo posible las coberturas y alcances de las emisoras regionales a los límites geográficos autonómicos, de forma que las distintas poblaciones reciban las señales procedentes de las emisoras y reemisores de, su propia comunidad. Hacer regionalizable la primera cadena es prácticamente imposible, porque resultaría muy costoso. La segunda cadena, en cambio, al estar constituida básicamente por emisoras en UHF, tiene un alcance más limitado en cuanto a la propagaión de las señales y es más fácil circunscribirla a los límites autonómicos. Puesto que está menos desarrollada que la primera cadena, estamos a tiempo de hacerla regionalizable".

Radioenlaces y emisoras

La función de la red es transinitir las señales radioeléctrícas de las imágenes y sonidos hasta los receptores de los usuarios. Consta fundamentalmente de radioenlaces; emisoras (llamadas también centros emisores o transmisores) y reemisores (también llamados repetidores). La red tiene 103 estaciones de radioenlaces, que transportan las señales de radio y de televisión; 44 emisoras y 564 reemisores de TVE 1; y 48 emisoras y 321 reeemisores de TVE 2, según los últimos datos del pasado año.

La red de radioenlaces (o microondas) es su sistema vertebral: transporta la señal desde los estudios hasta las emisoras repartidas por todo el territorio nacional. Los radioenlaces transmiten las señales desde cualquier punto en que se originen los programas: estudios centrales o de los centros regionales y periféricos, Y desde los distintos escenarios de retransmisiones. Los radioenlaces dé TVE facilitan también el tráfico internacional: por la red española pasan los programas de intercambio entre los distintos países de Europa y Portugal, Argelia y Marruecos. Las conexiones entre la red peninsular y Canarias se efectúan por satélite. El nuevo edíficío de Torrespafia, en Madrid, llamado también el pirulí, será el centro nodal de la red para distribuir las señales desde él hasta todos los centros emisores.

Las emisoras reciben las señales de vídeo y sonido a través de la red de radioenlaces. Tienen como misión difundir los programas para determinadas áreas geográficas. La compleja orografía de España da lugar a zonas de sombra a las que no llega la señal o donde se recibe en malas condiciones de calidad. Las zonas de sombra se salvan con los reemisores. Éstos reciben la señal de una emisora o de otro reemisor, la amplífican y la remiten en otra frecuencia a la zona no cubierta por la emisora o reemisor principal.

La regionalización afecta tanto a la red de radicienlaces como a la red de emisoras y reemisores. El pasado Campeonato Mundial de Fútbol permitió a RTVE renovar su red de difusión, en la que se invirtieron algo más de 7.000 millones de pesetas.

La red de difusión de RTVE tiene una plantilla de 1.290 empleados, de los que sólo 250 trabajan en los servicios centrales de Madrid. Su presupuesto para inversiones es muy pequeño -entre 400 y 800 millones de pesetas por año- si se consideran los presupuestos globales de RTVE, que rondan este año los 50.000 millones de pesetas.

No se descarta que el Gobierno plantee en el futuro, según se ha podido saber de distintas fuentes oficiales, la conveniencia de segregar la red de RTVE del Ente Público y crear una empresa en la que se centralicen todas las redes de comunicación, como teléfonos, telégrafos, radio estatal, televisión, etcétera, y adscribirla al Ministerio de Transportes y Comunicaciones, como sucede en los países de Europa occidental.