La autonomía del Banco de España no está amenazada, según Álvarez Rendueles

ENVIADO ESPECIAL"Yo no veo que la autonomía del Banco de España esté amenazada", afirmó el gobernador de la citada institución, José Ramón Álvarez Rendueles, en un coloquio posterior a su conferencia sobre La política monetaria en España, que ayer dictó en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo, dentro del curso que dirige el profesor Enrique Fuentes Quintana sobre Introducción al sistema financiero español.

El gobernador del Banco de España respondía así, indirectamente, a recientes informaciones sobre la independencia del banco emisor. La polémica, como recordó Álvarez Rendueles, surgió en el Congreso al manifestar un diputado que los presupuestos del Banco de España, a tenor de la Constitución, debían presentarse junto a los Presupuestos Generales del Estado. El gobernador dijo que había que revisar lo que se entiende por ingresos y gastos públicos, y añadió que, a su juicio, los ingresos y gastos del Banco de España no deben considerarse como tales a efectos presupuestarios.

José Ramón Alvarez Rendueles, en su intervención, explicó cómo había surgido la necesidad de adoptar una política monetaria activa, al mostrarse poco eficaces, ante los nuevos problemas planteados por la crisis, los viejos esquemas keynesianos e intentar estabilizar los tipos de interés.

El gobernador expuso las causas que habían llevado a los bancos centrales, en las décadas del sesenta y setenta, a adoptar políticas activas basadas en el control cuantitativo de la masa monetaria. Explicó la elección por el Banco de España de la denomínada M-3 (disponibilidades líquidas) como variable para instrumentar en nuestro país esta política, y añadió que, por la experiencia obtenida en los años que lleva vigente, se ha mostrado como un instrumento eficaz.

No obstante, en los últimos tiempos, a la vista de la expansión y desarrollo de otros activos no monetarios (pagarés del Tesoro, pagarés de empresa, bonos de caja y cédulas hipotecarias) se han ampliado a estos nuevos instrumentos la fijación de objetivos y seguimiento de los mismos por parte del Banco de España. En este punto hizo referencia al reciente acuerdo con la bánca privada para proceder a una pausa, a un compás de espera de tres meses en el rápido desarrollo de estos activos cuasi monetarios que en los últimos meses han superado ampliamente las previsiones. El gobernador insinuó que hay que analizar con detenimiento el éxito de estos nuevos instrumentos, cuya expansión puede estar motivada por razones ajenas a los mismos (fiscales, etcétera).

El déficit amenaza la reforma

El gobernador negó las acusaciones de monetarismo que se hacen a la política seguida por el banco emisor y dijo que la política monetaria debe colaborar con la política de rentas y la política fiscal para conseguir los ajustes necesarios para la superación de la crisis. "La política monetaria es una condición necesaria pero no suficiente".El profesor Enrique Fuentes Quintana, en una lección previa a la dictada por Álvarez Rendueles, describió el sistema financiero español y su evolución. Al término de la misma, y tras hacer un pequeño balance de los cambios experimentados, manifestó que "el crecimiento constante del déficit público hace peligrar los objetivos de la reforma del sistema financiero".

En un tono muy didáctico, el profesor Fuentes Quintana describió tres grandes líneas como características de la reforma del sistema financiero español: introducción de una política monetaria activa y continua; potenciación de la libertad de mercado y de la competencia; y acción supervisora de las autoridades del uso de esa libertad por parte de las instituciones y agentes.

A continuación desarrolló y amplió cada uno de estos capítulos, describiendo la liberalización de los tipos de interés, la evolución de los coeficientes, la creación de nuevas entidades y mercados, y la acción tutelar del Banco de España (inspección, exigencia de solvencia y diversificación de riesgo, circulares sobre determinadas provisiones y Fondo de Garantía de Depósitos) para hacer frente a los problemas de las entidades financieras en crisis".

Fuentes Quintana, tras esta descripción, hizo su pequeño balance de la reforma del sistema financiero. Dijo que quienes la criticaban no habían elaborado ninguna alternativa a la misma; que se habían dado abusos en la libertad otorgada a las instituciones (excesiva expansión y despilfarro que incrementan los costes de intermediación) pero que "los abusos de libertad, sólo se corrigen con libertad"; que la reforma no era la causante del alza de los tipos de interés y que el sector público se había servido del cambio del sistema financiero.