El Partido de Garrigues, contra la coalición con AP

Dirigentes del Partido Demócrata Liberal (PDL), reunidos ayer en una minicumbre presidida por Antonio Garrigues, ratificaron su postura de mantenerse fuera de "cualquier coalición que signifique una bipolarización de la vida política española". Con ello, desmintieron "informaciones interesadas", aparecidas recientemente en algunos medios de comunicación, según las cuales el PDL estaría a punto de negociar una convergencia con, la Unión Liberal, de Pedro Schwartz, coaligada con AP.La reunión de ayer del PDL, a la que asistieron algunos dirigentes provinciales, constituyó una preparación de los encuentros de los comités ejecutivo y federal del partido, que tendrán lugar el próximo 29 de junio.

Medios del PDL concedieron gran importancia a estos encuentros, dado que "perfilarán la política futura del partido". Pese a ser minoritaria, existe una tendencia en el partido de Garrigues favorable a llegar a un entendimiento, cara a 1.986, con la coalición conservadora. Sin embargo, la línea que aparenta ser mayoritaria en la actualidad se decanta por el mantenimiento del PDL en una situación centrista, bien formando parte de la operación reformista impulsada por Miguel Roca, bien utilizando otras vías aún no exploradas.

Roca y Garrigues se entrevistarán el 5 de julio

El PDL parece haber optado por mantenerse en una situación de expectativa acerca de la llamada operación reformista; así, el partido de Garrigues no estará presente en la próxima cumbre convocada por Miguel Roca en Madrid, el 21 de junio. Roca y Garrigues no deben entrevistarse, para hablar de una posible aproximación entre ambos, hasta el 5 de julio. La principal divergencia entre ambos consiste en el deseo de Roca de que todas las formaciones políticas que integren el Partido Reformista Democrático se disuelvan previamente, algo que el PDL no parece dispuesto a hacer.Por lo que se refiere a una hipotética convergencia entre el PDL y la Unión Liberal de Schwartz, sugerida el domingo en algunas informaciones de prensa, dirigentes del partido de Garrigues rechazaron tajantemente esta posibilidad, aun admitiendo que existe "un pequeño sector" favorable a un acercamiento a la coalición liderada por Fraga. Pero la rivalidad entre ambas formaciones que se recIaman liberales parece crecer de día en día, menudeando los ataques mutuos en privado. Uno de los temas a tratar en la próxima reunión de los comités ejecutivo y federal del PDL, el día 29, sería la petición hecha por algunos miembros del partido de que se expulse a quienes se muestran partidarios de una aproximación a la UL (o, al menos, de una negociación interna de la familia liberal).

Al margen de estas disputas internas, Garrigues trata de potenciar los vínculos internacionales del PDL: mañana viajará a Toronto (Canadá), para asistir a un encuentro de la Internacional Liberal.