El socialista Pedro Guerra, presidente del Parlamento regional

"Hagamos lo imposible por avivar la conciencia y el sentimiento regional", señaló ayer, durante un discurso tras su elección, el presidente del Parlamento autónomo canario, Pedro Guerra, del PSOE, que recibió 47 votos, entre ellos los de la coalición AP-PDP-UL.

Los sesenta dipuatados que componen el Parlamento iniciaron de esta manera un período de cuatro años, que para Canarias supone la primera etapa autónomica de su historia. Anteriormente, la asamblea legislativa había funcionado con carácter provisional por espacio de cuatro meses. Su actual titular, el abogado Guerra Cabrera, había sido desde entonces su presidente.

El PSOE, que obtuvo en las pasadas elecciones mayoría relativa, con 27 diputados, logró el apoyo de todas las fuerzas políticas en el momento de ser elegido su candidato para la presidencia.

En el Parlamento canario figuran nueve organizaciones políticas. La coalición AP-PDP-UL cuenta con 17 escaños, seguida por el CDS, con seis. El resto lo constituyen formaciones independientes y nacionalistas junto con el PCE, que logró un representante en la Cámara. 59 de los sesenta diputados son hombres y la única mujera, María Dolores Palliser, ha sido hasta ahora miembro del gobierno autónomo.

Además del presidente, el PSOE logró el respaldo de la mayoría para los puestos de primer vicepresidente, que recayó en Bernardo Navarro Valdivieso y para el de secretario primero de la mesa, José Vicente Hernández Díaz. El vicepresidente segundo, Manuel de la Cueva Fernández, es de AP-PDP-UL yel secretario segundo, Antonio Rodríguez Marichal, de Asamblea Majorera (Fuerteventura). En su discurso Pedro Guerra dijo que se abría "un horizonte apasionante" e invitó a los diputados a "afrontar juntos, codo con codo, el reto de esta hora crucial".