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Pocos electores desean para España un sistema bipartidista

Los madrileños prefieren la pluralidad de partidos, sobre todo la mayoría de los socialistas y casi todos los comunistas

El interés por el sistema de partidos, políticos ha resurgido en España tras las convulsiones ocasionadas por las elecciones legislativa,; del 28 de octubre. Para explicar la situación actual del mismo, así como las motivaciones del voto municipal y autonómico del pasado 8 de mayo, CITEP ha realizado estudios que afectan a Madrid, Navarra, el País Vasco y Cataluña, cuyos aspectos más destacados comienza hoy a. publicar EL PAIS.Los analistas de CITEP inician su trabajo con una descripción de las notas que diferencian a los sistemas de partidos existentes en las democracias (1):

Bipartidismo puro. Se produce cuando los dos grandes partidos captan más del 90% del electorado. Otras características son la igualdad casi absoluta de ambos, su no dependencia de partidos bisagra para la alternancia en el poder y la tendencia, a largo plazo, de que ambas fuerzas se igualen, caracterizándose dicho desarrollo por una evolución pendular.

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Sistemas intermedios (dos partidos y medio o tripartidistas). Las dos grandes fuerzas obtienen entre el 75% y 80%. del voto; se da algún tipo de partido bisagra entre ambas formaciones. Cuando los dos primeros no sobrepasan el 62-66% del voto, se habla de "tripartidismo", ya que existe una tercera fuerza apreciable, aunque mucho más. débil que las otras dos. El equilibrio de un sistema semejante se logra si existe desigualdad entre los tres partidos, no si los tres son iguales.

Pluripartidismo. Los sistemas con 4 o 5 partidos, e incluso más, se caracterizan por desigualdades acentuadas y permanentes entre el primero y el segundo partido; el primero obtiene entre el 47% y el 52%, del voto, y el segundo, alrededor de un tercio del total del voto. El tercero es mucho más débil, y generalmente se da una división del 25%, al 30% del voto entre varias formaciones; como consecuencia, existe una desigualdad graride entre los diversos partidos, y esta situación se mantiene largamente. "La forma extrema de desigualdad", dicen los analistas de CITEP, "da lugar al sistema pluripartidista con partido dominante, que parece ser teóricamente el case, español".

El estudio de CITEP ha tratado de averiguar lo que piensan los madrileños respecto al sistema actual de partidos y también lo que les gustaría que ocurriera. El resultado es que una mayoría (seria, pero no aplastante) considera correcto describir el sistema español como bipartidista, aunque les gustaría más que fuera pluripartidista.

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A la pregunta de si es correcto el juicio de que en España sólo hay dos partidos importantes, el 54,5% contestó que sí se está difundiendo tal idea y que, de hecho, a nivel nacional sólo tienen importancia PSOE y AP-PDP-UL; el 39,5% contestaron que no era correcto ese juicio, y un 6% no tiene opinión.

Ahora bien, a la pregunta sobre la aceptación o no de un sistema bipartidista, el electorado madrileño se dividió de la forma siguiente: el 56,4%, a favor del pluripartidismo; el 28,1%, a favor del bipartidismo; el 10,9% no manifestó preferencia por uno u otro sistema, y sólo el 4,4% no dio opinión alguna.

Los analistas de CITEP han comentado así estos resultados: "Es absolutamente claro que la extrapolación política hecha la noche misma de las elecciones municipales sobre el bipartidismo no obtiene ninguna apoyatura a nivel del electorado de Madrid, ya que la categoría pluripartidista es claramente mayoritaria (56,4%) y que el bipartidismo puro representa poco más de una cuarta parte del mismo electorado".

El número de partidarios de uno u otro sistema varía según las diferentes opciones. Los votantes socialistas se pronuncian muy mayoritariamente por el pluripartidismo (61,8%), más que la media de los electores madrileños, mientras que la porción de bipartidistas del PSOE está también por debajo de la media de Madrid. Por el contra rio, casi la mitad de la clientela de AP-PDP-UL (49,5%) se define como bipartidista, mientras que apenas un tercio prefiere el pluripartidismo, al tiempo que se da un importante nivel de indiferentes.

Entre los, votantes comunistas el pluripartidismo es deseado por el 76,3%. de los mismos, contra sólo un 19% de bipartidistas. En el caso del Centro Democrático y Social (CDS) aparece, curiosamente, un 21% de bipartidistas. Respecto al PDL, los analistas de CITEP advierten que ha obtenido un nivel de sensibilidad demasiado bajo en la muestra para que sus datos puedan reflejar con fiabilidad la opinión de dicho sector.

Además de obtener información sobre la aceptación o rechazo del .bipartidismo y del pluripartidismo, los encuestadores formularon preguntas para valorar las cualidades que el electorado atribuye a ambos. Para el PSOE, PCE y CDS, el pluripartidismo es el sistema más moderno para la toma de decisiones, el más abierto al diálogo y a la negociación y el más acorde.con la tradición española; en cambio, los votantes de AP atríbuyen esas cualidades mayoritariamente al bipartídismo. Lo mismo ocurre con la capacidad de uno u otro. sistema para mantener el equilibrio político, asegurar la estabilidad y evitar enfrentamientos; AP-PDP-UL considera que el bipartidismo asegura mejor esos objetivos, mientras el resto del electorado opina que el pluripartidismo es el más adecuado para los mismos.

Varios partidos, pero uno dominante

Tanto las notas que caracterizan al actual sistema español de partidos como las opiniones de los electores manifiestan que nos encontramos ante un sistema pluripartidista, al mismo tiempo que los votantes de la segunda fuerza (AP-PDP-UL) prefieren en realidad el bipartidismo.

Las notas que caracterizan el pluripartidismo, sintetizadas al comienzo de este texto, se cumplen perfectamente en el caso español. Los analistas de CITEP consideran a España como "un caso específico de pluripartidismo, a saber, el pluripartidismo a partido dominante". Examinadas las características del bipartidismo, es evidente qué no se cumplen en el caso español.

Las analistas extraen tres consecuencias políticas de este sistema como conclusión del estudio:

-"La desigualdad entre el primer partido (PSOE) y el segundo (AP-PDP-UL) reviste carácter permanente en sistemas pluripartidistas a partido dominante".

-"Al no existir, evolución pen-

(1) Las tesis que defiende MEP sobre los sistemas de partidos se basan en los trabajos Political parties and politic development, de Joseph La Palombara y Myron Weiner, y Les partis politiques, de Jean Charlot, Giovanni Sartori, Jean Blondel y Joseph La Palombara, que dan un paso más respecto a los clásicos ensayos de Maurice Duverger.

Pocos electores desean para España un sistema de bipartidismo

dular (propia de sistemas bipartidistas) que tienda a reducir las diferencias entre el partido dominante y el siguiente, la sola evolución previsible en el tiempo -dado un normal funcionamiento democrático a medio y largo plazo- son pequeñas oscilaciones del partido dominante, que son normalmente compensadas por partidos intermedios (hoy muy pequeños), o pequeñas oscilaciones del segundo partido que afectarían igualmente a partidos intermedios".-"Se trata de un sistema muy estable, que ofrece grandes oportunidades a los partidos pequeños y a los partidos nacionalistas, al interior del cual no existe posibilidad de trasvase entre el partido dominante y el segundo partido del sistema".

El porqué del voto

Cuando una persona elige entre una u otra opción política, lo hace en función de expectativas más o menos concretas y pensando que ei partido votado es el que más posibilidades tiene de convertir en realidad las aspiraciones personales.

Estudiando las respuestas de los encuestados madrileños en función del voto de las pasadas elecciones, los analistas concluyen que el electorado más homogéneo en su razonamiento es el del PCE: el 43% de sus partidarios ha manifestado que vota comunista para corregir tantas -injusticias que perduran", un 15% lo hace porque el partido lo está haciendo bien" y casi un 11 % piensa que "es la única salida a la crisis y el paro".

Para los votantes de la coalición AP-PDP-UL, las razones de su opción son m. uy diversas: la más apoyada es la idea de que "con mi voto preparo una sociedad más humana para mis hijos" (19,5%), seguida de otras muchas: "Impedir que se desmorone la moral tradicional", "la necesidad de un equilibrio", "la única salida a la crisis y al paro". Muchos votantes de APPDP-UL (19,5% ) dicen no haber tenido otra alternativa, porcentaje éste sólo superado por los electores del CDS.

Más de un tercio del electorado socialista piensa que con su voto "corrige las injusticias que aún perduran", mientras que otro 34% se reparte, en igual proporción, entre la idea de que su partido "lo está haciendo bien" y la de que así se forma una sociedad más humana".

"En conclusión", afirman los analistas de CITEP, -se puede decir que lo que los madrileños han perseguido con su voto han sido el corregir las injusticias, lograr una sociedad más humana de cara al futuro y tomar el camino que consideran como único viable para salir de la crisis económica y el paro. En estos tres puntos coiricide la mayoría de los consultados, sea cual sea su voto pasado. Para los electores de centro-derecha y derecha, la consideración más importante es la necesidad de encontrar un equilibrio al poder establecído. También es considerable un determinado grupo de electóres, sobre todo las personas jóvenes menores de 45 años, que se vio forzado a emitir su voto por un partido que no era el suyo, por falta de alternativa".

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