Los bomberos emplearon dos horas en rescatar los cuerpos de cuatro atracadores muertos en su fuga

Una quincena de bomberos, que utilizaron un coche y dos grúas, trabajaron durante dos horas para poder extraer de entre los hierros los cadáveres de los cuatro presuntos atracadores cuyo automóvil chocó contra un autocar, y quedó totalmente destrozado, cuando huían de la Policía después de haber robado en una joyería de la localidad madrileña de Leganés. Su botín sumaba 15 millones de pesetas en joyas.

La Policía identificó ayer a los cuatro jóvenes fallecidos en el accidente como Pedro Amador, de 22 años; Celestino Fernández Durán, de 19; Miguel Radillo, de 20, y Jose Ramón Rivero, de 20. Todos ellos tenían antecedentes por diversos delitos contra la propiedad. Asimismo, la Jefatura Superior de Policía de Madrid informó que en el coche accidentado fue hallada una escopeta del calibre 12 milímetros, serrada en las partes anterior y posterior, una pistola de gas y una navaja, junto con la totalidad del botín, que consistía en 593 piezas de joyería, valoradas en unos 15 millones de pesetas, 15.000 pesetas en metálico y 37 llaves que correspondían a cajones del establecimiento asaltado.Los cadáveres de los cuatro presuntos atracadores fueron trasladados al Instituto Anatómico Forense de Madrid, donde ayer se les práctico la necropsia microscópica que determine la naturaleza exacta de las lesiones que les produjeron la muerte.

Como informó EL PAIS en su segunda edición de ayer, los cuatro atracadores asaltaron la joyería Dublín de la madrileña población de Leganés a última hora de la tarde del lunes, y huyeron en un coche previamente robado, un Alfa Romeo matriculado en Zaragoza. Ante la persecución de un coche policial, los fugitivos no respetaron la señal roja de un semáforo en el barrio de Aluche, y el automóvil chocó contra un autocar de viajeros. Los cuatro ocupantes quedaron atrapados entre la chatarra y fue precisa la intervención de los bomberos para extraer sus mutilados cuerpos.