El Exterior reduce el dividendo para aumentar las provisiones

El presidente del Banco Exterior de España, Francisco Fernández Ordóñez, anunció ayer una reducción del dividendo por acción de las 90 pesetas que se pagaron a cargo de los resultados de 1981 a las 75 pesetas que se harán efectivas del ejercicio de 1982, en el transcurso de la junta general de la entidad. A pesar de que el excedente de explotación del banco superó los 20.000 millones de pesetas, lo que representa un crecimiento del 66% sobre el año anterior, los responsables "del más público de los bancos privados" decidieron destinar la mayor parte de estos fondos a saneamientos y provisiones, marcando un camino que puede ser seguido por el resto de la banca en los próximos años.

Los recursos ajenos del Banco Exterior de España crecieron durante 1982 en cerca de medio billón de pesetas, lo que significa un incremento del 50% sobre el año anterior. Este crecimiento se debió sobre todo a la partida correspondiente a la apelación al mercado financiero, que aumentó en 311.000 millones de pesetas, seguida del endeudamiento en moneda exterior -con un incremento en valor absoluto de 221.000 millones de pesetas-. El aumento de los acreedores en pesetas fue bastante más moderado, 57.000 millones de pesetas, que supone un 16,3% sobre 1981. Los recursos oficiales crecieron en 176.000 millones.A lo largo de 1982, el Banco Exterior de España realizó un importante esfuerzo en materia inverso ra. La financiación de exportaciones presentaba, a 31 de diciembre del pasado ejercicio, un saldo vivo de 700.000 millones de pesetas, que significan el 62% del total de crédito a la exportación.

El excedente de explotación obtenido por el Exterior superó los 20.000 millones de pesetas, de los que 9.551 millones se destinan a la dotación de fondos de provisión de fallidos -en 1981, las provisiones se situaron en 6.166 millones- y 4.330 millones engrosan el fondo de fluctuación de cambios.

Descontando del resultado de explotación estas cifras y las correspondientes a amortizaciones, saneamiento de la cartera de valores, aportación al Fondo de Garantía de Depósitos y fondo de jubilaciones, resultan unos beneficios distribuibles de 4.073 millones de pesetas, frente a los 3.6 70 millones de un año antes. Al pago del dividendo se destinarán 1.854 millones de pesetas (75 pesetas por acción).

Incidentes

Durante la junta, media docena de empleados del banco irrumpieron en la sala con una pancarta en la que podía leerse "En el mundo del Exterior no cuentan las reivindicaciones del trabajador". En el turno de ruegos y preguntas; un empleado, perteneciente a la Candidatura Autónoma de Trabajadores, haciendo valer su condicción de accionista, leyó un comunicado, en relación con las negociaciones del convenio, en el que se afirmaba que no habría beneficios a repartir ni los presentas podrían ostentar su condición de accionistas del banco, si no hubiera sido por la labor callada de los más de 9.000 trabajadores, que realizan su trabajo "en condiciones a veces inmorales.La lectura del comunicado fue interrumpida por abucheos y gritos de "fuera, fuera". Una treintena de accionistas abandonaron la sala en señal de protesta.