'Hannie Caulder', la primitiva Raquel
Deseando vengarse de los tres hermanos que mataron a su marido (no sin antes violarla. a ella), Raquel Welch inicia su persecución en la película Hannie Caulder. Las aventuras que le suceden no interesaron cuando esta coproducción anglo-hispanonorteamericana, rodada en 197 , llegó al paciente público y a la no menos paciente crítica. Lo cierto, sin embargo, es que ésta, con mucha asiduidad, se dejó convencer por sí misma de las escasas cualidades interpretativas de Raquel Welch: al cabo del tiempo la ex mujer objeto ha llegado a convertirse en una excelente intérprete.Los años de los espaguetis-westem no le permitían sugerirlo. El erotismo de su cuerpo era el único elemento dramático que aportaba; tanto es así que abundaron las humoradas cuando se estrenó Hannie Caulder, la película que hoy veremos, una más de las que entonces rodaba con tan sugestivos como escasos atributos para la interpretación (Myra Breckenridge había sido su título anterior). El crítico Alvin H. Marill se reía, en Film Reviews, de que hubiese habido un técnico en vestuario para rodar Hannie Caulder, cuando Raquel Welch apenas lucía unos ajustados tejanos o un poncho deteriorado; valoraba con más seriedad los últimos minutos de proyección, con la pelea a cuchillo y revólver entre Robert Culp y Ernest Borgnine, y los trucos cinematográficos que cerraban la historia.
Hannie Cauider se emite hoy a las 21.30 por la segunda cadena.
