Teresa Rabal y Eduardo Rodrigo
que han instalado su circo infantil en el Prado de San Sebastián, de Sevilla, donde, pensaban actuar los día 9 al 13 como inicio de una amplia gira por toda Andalucía, se encontraron con la desagradable sorpresa de que el pleno del ayuntamiento les ha obligado a retirar todos los carteles publicitarios y levantar la carpa, cuando ya tienen todas las entradas vendidas y un fuerte gasto en publicidad, pues de lo contrario se rían multados. Algo parecido ocurrió hace dos años con, el circo de Angel Cristo, que tuvo que pagar dos millones de multa por el mismo motivo, informa Miguel Gallardo.
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