La OIT debe designar nuevo director general

El Consejo de Administración de la OIT (Organización Internacional del Trabajo), cuyas comisiones de trabajo comenzaron a reunirse ayer, deberá, en esta ocasión, designar el próximo director general de la organización, determinar los diez países de mayor importancia industrial, examinar los informes sobre reparto de contribuciones, las libertades sindicales, la aplicación de convenios y recomendaciones, etcétera. En total, un orden del día en veinte puntos, dos de los cuales nos afectan directamente: la asignación de nuevas cuotas a los presupuestos generales de la OIT (230 millones de pesetas) y la posición de España en el ranking de países de mayor importancia industrial.En marzo de 1980, el entonces embajador, Manuel Jiménez de Parga, amenazó con llevar la cuestión hasta la Corte Internacional de Justicia de La Haya" si no se satisfacían las exigencias españolas. La situación de España es, desde hace algún tiempo, anacrónica. A la hora de pagar -y el baremo se aplica en función de la importancia económica del país-, España se sitúa en novena posición, lo que teóricamente nos daría derecho a ocupar un puesto permanente en el consejo.