Las negociaciones en el País Vasco

La negociaciones tripartitas sobre la pacificación del País Vasco, propuestas por el presidente del Gobierno autónomo de Vitoria, Garaicoetxea, han finalizado antes de haber comenzado. Después del atentado con lanzagranadas cometido el 2 de febrero por la noche al sur de San Sebastián, que ha costado la vida a un guardia civil y ha herido a otros dos, los socialistas han comunicado que se negaban a discutir con Herri Batasuna. Esta coalición, próxima a ETA Militar, que ha reivindicado el atentado, era su interlocutor con el PNV.La propuesta de Garaicoetxea había parecido audaz. Por primera vez desde 1978, en que había fracasado una negociación secreta entre ETA y el ministro del Interior, Martín Villa, las fuerzas políticas en el poder en Madrid y en Vitoria parecían querer negociar con los independentistas. Pero antes del atentado del miércoles los obstáculos se habían multiplicado. Herri Batasuna ha exigido que los periodistas estén presentes en las conversaciones, una reivindicación rechazada por los socialistas y el PNV, que temen que las negociaciones se transformen en simple operación de propaganda. La coalición independentista ha afirmado que deseaba solamente servir de mediadora entre el Gobierno y ETA Militar para negociaciones interiores con esta organización, lo que rechazan los socialistas.

Estos últimos habían declarado que no negociarían si un nuevo atentado terrorista se producía en el País Vasco. ¿Con el atentado del miércoles, ETA ha querido provocar la ruptura haciendo recaer la responsabilidad en los socialistas? Desde la llegada al poder de Felipe González, los independentistas vascos parecían dudar sobre la táctica a seguir, pasando de declaraciones radicales a afirmaciones más conciliadoras. Lo que es evidente es que el cambio de Gobierno en Madrid no ha bastado para desbloquear el interminable problema vasco.

4 de febrero