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La libra esterlina cotizó ayer al nivel mas bajo de su historia

Soledad Gallego-Díaz

La libra esterlina continuó ayer, por segundo día consecutivo, al nivel más bajo de su historia. A la apertura del mercado internacional, la moneda británica cotizó a sólo 1,52 dólares (frente a 1,54 el lunes y 1,56 el viernes), y aunque se recuperó algo hasta llegar a 1,53, el nerviosismo y la confusión que reinaron ayer tanto en los mercados de divisas . como en el mercado libre de petróleo de Rotterdam hacen predecir a los expertos una difícil recuperación.La noticia de que los miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), reunidos en Ginebra, no habían llegado a un acuerdo provocó el lunes una caída espectacular de la libra, que ya había sufrido un duro ataque la semana pasada, y el pánico en Wall Street, donde el índice Dow Jones perdió 22,8 puntos (ayer volvió a recuperar 6). La reacción es lógica: el Reino Unido es exportador de petróleo, y, aunque no pertenece a la OPEP, una eventual guerra de precios podría suponer unas fuertes pérdidas para el Tesoro y el cierre de la balanza de pagos con un déficit de casi 100.000 millones de pesetas, en el más favorable de los casos.

Las predicciones del jeque Yamani, según las cuales el precio del petróleo del Mar del Norte podría bajar tres dólares el barril (lo que supondría unas pérdidas para el Reino Unido de más de 750 millones de libras, unos 150.000 millones de pesetas), parecen cumplirse. En el mercado libre de Rotterdam, el barómetro más sensible para este tipo de operaciones, el petróleo británico bajó ayer de 33 dólares por barril a 29,5. Peor aún para Londres: un portavoz de Rotterdam estimó que parecia posible una caída hasta 25 dólares.

Consecuencias financieras

Si el precio del petróleo bajara hasta esa cifra, las consecuencias financieras para el Reino Unido pueden ser desastrosas, no sólo porque el petróleo del Mar del Norte es caro de extraer, sino también porque, entre otras cosas, los préstamos efectuados por los bancos británicos a países productores, como Nigeria, México o Venezuela, están calculados sobre esa cantidad.El Banco de Inglaterra no ha intervenido para sostener a la libra, ni frente al dólar ni frente a monedas europeas como el marco alemán o el franco suizo, ante las que la libra ha perdido también valor. Los dirigentes del banco señalan que las tasas de interés no deben subir, pero si la situación no mejora en las próximas horas no sería extraño que, por segunda vez en menos de diez días, los principales bancos del país se decidieran a subirlas por encima del 11 % actual.

Una situación similar, en octubre de 1976, en que la libra se cotizó a 1,55 dólares (es decir, un poco mejor que ahora) se resolvió con una petición de auxilio al Fondo Monetario Internacional.

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