Albert Pernitsch,
con 360 kilos de peso, sin duda el hombre más gordo de Austria, es delincuente habitual, pero no puede ser condenado porque no entra en el coche celular que debe llevarlo al juzgado. Así lo informa el diario vienés Kronen Zeitung, al señalar que el obeso vive de sólo 4.000 chelines mensuales (unas 26.000 pesetas) y que recurre a "pequeños trucos para llegar a fin de mes". Así, hace pocos días, cuenta el diario, el llenito, de veintiséis años y 2,20 metros de cintura, compró a plazos un aparato de televisión y otro de vídeo y los vendió luego a sus amigos sin terminar de pagar las cuotas pendientes. El juzgado municipal de Gratkorn, cerca de la ciudad de Graz, quiso trasladarlo a la sala de la vista, pero la comisaría de policía no disponía de ningún vehículo de suficientes dimensiones, por lo que tuvo que aplazarse la vista.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.