La Real no conoce la victoria ante el Madrid en esta temporada

Un gol de Metgod marcado, poco antes del descanso del encuentro de ida, hace dos meses y medio en Chamartín, es la renta con la que el Real Madrid saltará hoy al campo de Atocha. El partido de vuelta de la primera Supercopa de la historia del fútbol español, se juega esta noche, a las ocho, en el viejo estadio donostiarra.El campeón de Liga, la Real Sociedad, tratará de superar esa mínima ventaja con la que partirá el campeón de Copa. A las diez menos cuarto de la noche, o un poco más tarde si hay necesidad de prórroga y penaltis, el tercer torneo oficial organizado por la Federación Española de Fútbol inaugurará su palmarés con uno de los dos reales, el de San Sebastián o el de Madrid.

El capitán de quien se adjudique esta doble confrontación recibirá el trofeo en litigio de manos de Pablo Porta, que ha viajado a la capital guipuzcoana en compañía de Agustín Domínguez. Arbitrará el aragonés Pes Pérez. Es medio día del club y las entradas son muy caras, pero aun así habrá llenazo. Con todo, la recaudación no alcanzará la que se hubiera realizado de haberse aceptado los quince millones ofrecidos por Televisión Española. Orbegozo, por ser disciplinado y solidario con la política establecida por Josep Lluís Núñez en la comisión de clubes, esta vez ha hecho un mal negocio.

Hasta hace tan solo unos años, anunciar en San Sebastián que el Real Madrid venía a jugar contra la Real, causaba una sensación tan solo equiparable a la que tiene un niño cuando se le amenaza con que va a venir Herodes.

En las últimas temporadas, el equipo madridisita, que estuvo más de veinte años sin perder en Atocha, ha sido derrotado ampliamente. En una ocasión, hace dos temporadas, el 3-1 de San Sebastián sirvió para superar el 1-0 de Madrid y a la postre, para que la Real ganara su primer título de Liga.

Sin embargo, las muchas bajas que tiene el club blanquiazul, octavo en la Liga y sin hombres tan importantes como Zamora, Satrústegui, Zubillaga y Olaizaola, más la de Kortabarría, reflejan un panorama como para que hoy la Real inteprete el papel de víctima en la celebración de los Santos Inocentes y el Madrid recobre el de rey infanticida. La rivalidad enconada entre los contendientes impedirá que se asuma el éxito madridista como una inocentada. Más bien resultará una broma pesada.

Con el título de Liga, virtualmente perdido, los vascos tienen hoy la tabla de salvación para una temporada que se presenta problemática. Dejar pasar una ocasión que se cristaliza en un solo partido, sería lamentable para la Real. Este año los dos equipos se han enfrentado en tres ocasiones, con otros tantos triunfos madridistas: 1-0 en el Carranza, el mismo resultado en la ida de esta Supercopa, y 4-0 en Chamartín hace poco más de un mes en partido de Liga.

Ormaechea, que como siempre se guarda la alineación hasta el final, se ha llevado a la concentración a dieciséis hombres. Kortabarría quedó descartado ayer, porque se ha resentido de las molestias que le impidieron jugar ante el Español hace doce días, al igual que Olaizaola. Su baja será cubierta por Gajate.

Recuperado Arconada de su conato gripal, la alineación podría ser ésta: Arconada; Celayeta, Górriz, Gajate, Murillo; Diego, Larrañaga, López Ufarte; Bakero, Uralde y Beguiristain o Suquía. Completan la convocatoria el meta suplente Biurrun, Orbegozo y Zúñiga.