20 millones de españoles han visto al Papa diariamente por televisión, segun TVE

Veinte millones de españoles han seguido diariamente por televisión la visita del papa Juan Pablo II a España, según datos facilitados por la dirección de TVE. Con la retransmisión en directo desde Santiago de Compostela, TVE ponía fin ayer a una de las mayores movilizaciones de medios técnicos, económicos y humanos destinadas a cubrir un acontecimiento del que sólo la televisión ha ofrecido más de sesenta horas de imágenes en nueve días y que han supuesto un coste ole cien millones de pesetas. El Vaticano y la jerarquía eclesiástica han influido directamente en las retransmisiones.

Televisión Española ha superado, por lo menos en número de horas de dedicación al tema, todas las marcas de retransmisión de visitas papales a países desarrollados. Según algunos seguidores de los viajes de Juan Pablo II la televisión le ha dedicado aquí la misma proporción de número de horas que en México, por ejemplo, aunque con la diferencia de que en este país era la televisión privada y no la estatal, la que retransmitía, y ello debido, entre otras razones, a que conseguía sustanciosas ganancias por publicidad. El tratamiento informativo ha sido, según estas mismas fuentes, más propio de países del, tercer mundo que de países europeos.Además, el seguimiento en directo por la primera cadena prácticamente de todas las intervenciones públicas del Papa, la referencia en los informativos a su diaria actividad y los resúmenes de todos los días tanto en la primera como en la segunda cadena, no sólo ha cambiado en muchos casos la estructura de la programación, especialmente la infantil, sino que, sobre todo, ha producido un efecto de repetición que ha llevado a mucha gente a identificar durante estos días la televisión con la immediata referencia al Papa y ha podido producir cansancio en la audiencia.

Este peligro de cansancio y saturación, anunciado por los consejeros socialistas y por el comunista cuando el director general de RTVE, Eugenio Nasarre, presentó al consejo los planes de seguimiento, de la visita del Papa, puede perpetuarse con una serie de programas posteriores a la visita del papa que ya prepara TVE para emitir en próximos días. No obstante, el director de Televisión, Miguel Angel Gozalo, asegura que este organismo ha recibido diariamente cientos de cartas, telegramas y llamadas teléfonicas de felicitación por la retransmisión de los actos del Papa.

La responsabilidad última de la cobertura televisiva del viaje del Papa a España la ha asumido personalmente el director general Eugenio Nasarre, quien ha seguido este proceso desde su viaje a Roma antes de la venida de Juan Pablo II hasta la despedida ayer en Santiago a la que Nasarre asistió desde una unidad móvil de TVE.

El papel de la Conferencia Episcopal Española, en relación directísima con el Vaticano, ha sido fundamental en la cobertura que han hecho los medios audiovisuales estatales del viaje del Papa. Según fuentes con responsabilidad en TVE el Vaticano y la jerarquía española han condicionado sustancialmente el tratamiento informativo de este acontecimiento. Este tratamiento fue planificado por una comisión de RTVE y miembros de la Conferencia Episcopal y en su planificación y ejecución han participado eclesiásticos propuestos por los obispos como el padre Martín Patino, José María Javierre, José Luis Martín Descalzo y Joaquín Luis Ortega, entre otros.

Objetivos cumplidos

"Hemos cumplido muy bien los objetivos que nos habíamos fijado", explica el director de TVE, Miguel Angel Gozalo. "A pesar de algunas deficiencias técnicas de las retransmisisones desde el Pais Vasco y Cataluña hemos respondido decorosamente a lo que nos habíamos propuesto". Sobre el número de horas de retransmisión. Gozalo dice que estudiaron lo que habían hecho otras televisiones europeas en la misma situación y que han obrado en consecuencia con la expectación que existía entre la gente. "La gente quería ante todo ver al Papa. El era el protagonista de la película y por eso ha llenado tanto la pantalla".Con esta última respuesta el director de TVE quería también salir al paso de la acusación de retransmisión unilateral, monolítica y falta de opiniones contrastadas. "El meter opiniones en contra hubiera creado anticlimax que en nada habrían favorecido el ambiente general. Nos hemos limitado a dar información. El análisis y el contraste, se podrá hacer después".

Del análisis de las retransmisiones se desprende que Televisión Española ha utilizado un estilo más propio de la narración fílmica de un espectáculo, que un tratamiento informativo de la noticia. No ha existido una elaboración propiamente informativa de esta noticia en los servicios informativos de TVE, ni un análisis por medio de mesas redondas, contraste de opiniones. Por otra parte, las imágenes ofrecidas respondían al mismo esquema: dar planos cortos del Papa y planos generales de las grandes concentraciones masivas.

Los asesores religiosos que han ayudado a locutores e informadores (algunos de viejo cuño como Matías Prats, Florencio Solchaga, Agustín Alberti, entre otros) han utilizado un lenguaje apologético al servicio de una información confesional, completamente persuasiva y en la mayoría de las veces triunfalista. En esta tentación también han caído algunos de los informadores laicos de TVE que transmitían en directo.

Juan Roldán, director de los servicios informativos y artífice en las pasadas elecciones de una de las mejores coberturas informativas que ha hecho TVE de una noticia, ha explicado que el tema de la información sobre el Papa ha desbordado el campo de sus responsabilidades. "Si yo hubiera tenido que planificar la información sobre esta visita lo hubiera hecho de otra manera, intentando que no fueratan estática y le habría dedicado menos horas".

Eugenio Nasarre ha sido asistido personalmente en la responsabilidad de la información sobre el Papa por Miguel Angel Gozalo, Juan Jesús Buhigas, que ha sido el responsable de la producción y por Luis Ignacio Seco, como coordinador de la información. Se han utilizado quince unidades móviles, cinco menos que en el pasado Mundial de Fútbol, pero en el caso del viaje del Papa su uso ha sido más intenso y con la dificultad añadida de que no eran retransmisionesdesde lugares fijos.