_
_
_
_
_
La dimisión de Santiago Carrillo

Carrillo: "La transición no ha terminado"

El Comité Central del Partido Comunista de España (PCE) ha aprobado el informe presentado por el secretario general saliente, Santiago Carrillo, sobre el fracaso del partido en las elecciones legislativas del pasado 28 de octubre, por 70 votos favorables, uno en contra y once abstenciones. En dicho informe se analizan a fondo las causas externas de la derrota electoral comunista y se apunta la necesidad de efectuar cambios internos.La idea central que preside el análisis de Carrillo es que "la transición no ha terminado". En esta situación política, se emplaza al partido para replantearse la táctica a seguir en la conferencia nacional prevista para los próximos días 17, 18 y 19 de diciembre.

Más información
El nuevo secretario general del Partido Comunista de España tiene 'manos libres' para efectuar cambios en el partido

Para el ex secretario general de los comunistas, las últimas elecciones legislativas han sido "un auténtico seísmo que ha trasformado el mapa político de la transición". Afirma que UCD "se ha hundido" y el PCE "ha sufrido una grave derrota".

Estos resultados plantean, a su juicio, "la necesidad de una profunda crítica, autocrítica y cambios en el PCE", si bien, a continuación, explica los resultados electorales de acuerdo a factores externos al propio partido comunista, tales como que el PSOE ha conservado y aumentado los votos obreros, y ha conquistado una parte importante del voto de la burguesía reformista, "más que con un compromiso directo con ésta, a través del pacto con los grandes poderes económicos e institucionales y con el partido de la derecha, a los que ha dado la seguridad de que su gestión va a orientarse a que España funcione".

Evitar el éxito del 'franguismo'

Según Carrillo, "la clase obrera y la izquierda han aceptado con su voto ese pacto, considerando, por encima de sus riesgos a medio plazo, la ventaja inmediata de un cambio y, probablemente, con la idea consciente o con la intuición de que ese tipo de pacto podría ser una garantía frente al peligro de golpe de Estado".El voto útil, sintetiza, ha ido a parar el PSOE, ante el deseo de avitar "ante todo el éxito de la derecha pura y dura de Fraga, o del franquismo, como decía un cartel electoral".

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Todo ello demuestra, continua el análisis, "el gran peso de la derecha, volcada al principio en la UCD y recogida ahora por AP, y el espíritu de moderación dominante entre las masas populares y los sectores de izquierda.

En estas condiciones", prosigue el informe, "sería erróneo decir que la transición ha terminado. La configuración del Estado de las autonomías aún está en pañales; la democratización de la Administración y del aparato del Estado no se ha iniciado, y además nos encontramos en medio de una crisis económica mundial a la que no se le ve fin y que en las débiles y obsoletas estructuras españolas repercute catastróficamente".

Nueva fase política

"Lo que sí puede afirmarse", concluye el informe de Santiago Carrillo, "es que estamos en una nueva fase política que se caracteriza, de un lado, por un evidente avance democrático y, por otro, de una grave bipolarización, lo que demanda una revisión de nuestra táctica". La crisis del comunismo internacional y el veto de la OTAN, asumido por el PSOE, a la presencia de ministros comunistas en los gobiernos occidentales, son citados por Carrillo como otros factores de la derrota, si bien "el decisivo ha sido que no se ha podido realizar la ruptura democrática".

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_