Presiones sobre el INI para que pague los intereses de la deuda de Aluminio-Alúmina

La firme política del Instituto Nacional de Industria (INI), en su personal pulso con la banca internacional sobre la deuda externa del grupo Aluminio-Alúmina Española, está siendo contestada en altas esferas de la Administración, las autoridades monetarias y la banca privada, que habrían aconsejado al organismo público y a la Empresa Nacional del Aluminio, SA (ENDASA), que suavicen su postura ante el riesgo de poner en peligro el crédito y la solvencia Internacional del Estado y las empresas españolas.

Estas presiones, junto a la posibilidad de que ENDASA sea requerida mañana miércoles ante los tribunales británicos por el impago de los intereses devengados de un crédito internacional de doscientos millones de dólares, hacen prever que esta última empresa pague hoy, antes de las cinco de la tarde, la parte que le corresponde en los citados intereses y que asciende a unos siete millones de dólares. Una decisión al respecto será comunicada hoy por ENDASA al consorcio de bancos acreedores, que tiene previsto reunirse en Londres para decidir sobre el resto del crédito, técnicamente en situación de default.El comité directivo del consorcio de bancos que dirigió el crédito sindicado de doscientos millones de dólares mantuvo ayer tarde una reunión, en la sede de ENDASA, con altos directivos de esta empresa y del Instituto Nacional de Industria (INI). El INI es accionista mayoritario de ENDASA, empresa que a su vez tiene el 55% de las acciones del grupo Aluminio-Alúmina, que se encuentra en suspensión de pagos. En la reunión, a la que también asistieron representantes de la multinacional Alcan (socio minoritario de ENDASA), no se disipó el interrogante de si se hará frente a los intereses del crédito, tal como había exigido el consorcio bancario la semana pasada.

Tras la citada reunión, que duró unas dos horas y media, altos directivos del INI mantuvieron otro encuentro en su sede social para estudiar las propuestas recibidas del consorcio. Los portavoces oficiales del INI mantuvieron ayer un gran hermetismo sobre los resultados de esta última reunión, aunque manifestaron que hoy se conocerá públicamente su postura, "cuando se envíen a los bancos los télex oportunos".

En medios bancarios internacionales se daba ayer por descontado que el INI, a través de ENDASA, hará frente a sus compromisos de pago. A este respecto se señalaba que el socio minoritario de la empresa, la canadiense Alcan, es partidario, de una solución pactada con los bancos que pase previamente por el pago de los intereses. A la multinacional canadiense, según las mismas fuentes, le estaría disgustando la "salida de tono" de la pugna que libra el INI con el grupo francés estatal Pechiney (presente en Aluminio a través de Alugasa, socio minoritario), y que este grupo habría sabido reorientarla hasta conseguir enfrentar al INI con el consorcio de acreedores.

Reunión en París

Precisamente, el comité directivo del sindicato de bancos extranjeros mantendrá hoy una reunión en París con los representantes del grupo Pechiney, al que harán partícipes de sus decisiones con relación al pago de los intereses del crédito. El grupo francés, a través de Alugasa, ha retirado la condicionalidad que había impuesto al pago de los intereses del crédito, una vez que el sindicato de bancos expresase su oposición a la aceleración (ejecución) de la totalidad del crédito, tal como le permite el contrato del préstamo.En este sentido, la certeza de que el INI se habría quedado sólo en su estrategia de buscar soluciones a largo plazo del conflicto del Aluminio -soluciones que, en opinión del INI, no vienen por la vía del pago de los intereses-, estaría provocando, a su vez, fuertes disensiones en el seno de la Administración española, donde ha comenzado a preocupar muy seriamente la posibilidad de que un pleito en los tribunales británicos que envuelva al INI afectaría muy negativamente al prestigio como prestario internacional del Estado español.

Fuentes de firme credibilidad han señalado a este periódico que el problema del aluminio habría sido estudiado detenidamente en la última reunión de la comisión del subsecretarios, previa al Consejo de Ministros de la semana pasada. En dicha reunión se habrían expresado opiniones totalmente contradictorias sobre como solventar el problema INI-Pechiney; alguno de los presentes alertó sobre las posibilidades de que la firme postura del Instituto Nacional de Industria afecte negativamente a la próxima salida a los mercados exteriores que está estudiando realizar el Reino de España y que recibió autorización, precisamente, en el pasado Consejo de Ministros.

La misma postura contraria a la estregia de enfrentamiento con la banca internacional ha contado con el apoyo de altas instancias monetarias y de la banca privada española. Las razones de su oposición a la tesis del INI se sustentarían en el efecto que, sobre las líneas de crédito extranjeras que poseen algunos bancos, estaría teniendo el conflicto del aluminio y las suspensiones de pagos de algunas empresas españolas.