Calvo Sotelo manifiesta su disgusto por el retraso de la integración española en la CEE

Los dos países que han ostentado hasta ahora la. presidencia de la Comunidad Económica Europea, Bélgica y Dinamarca, han demostrado con claridad que existe una voluntad política para resolver las cuestiones pendientes, como es la integración de España a este organismo, ha declarado el presidente del Gobierno español.Leopoldo Calvo Sotelo se mostró esperanzado a su regreso de Dinamarca por los avances y el progreso en las negociaciones para la integración de España en Europa este año, afirmando que de los dieciseis capítulos que es preciso negociar, seis de ellos están cerrados y preparados para el acuerdo final, siete en discusión y tres pendientes de tratar.

El presidente del Gobierno expresó, por otra parte, su disgusto por el retraso de nuestra integración a la comunidad, porque "pese a la reiteradas seguridades en este sentido que la comunidad y los países miembros han dado periódicamente a España, la realidad es que las negociaciones se han ido abriendo camino a través de la lentitud de los procedimientos y del retraso en las decisiones".

Este retraso, ha declarado el presidente Calvo Sotelo, no es aceptable para el Gobierno español, no puede explicarse a la opinión pública española ni europea, y no se justifica ni por razones políticas ni por razones técnicas. "Las instituciones comunitarias", concluyó Calvo Sotelo, "incurrirían en una grave responsabilidad histórica si no acertaran, por encima de los dificultades presentes, a dar un nuevo y definitivo impulso a la adhesión de España".