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Preparativos en el Reino Unido para la huelga general de mañana

Andrés Ortega

Los preparativos para mañana, miércoles, día de acción sindical -nadie habla de huelga general- en apoyo de las reivindicaciones salariales de las enfermeras y personal auxiliar sanitario, han venido a coincidir con la filtración de un documento que está estudiando el Gobierno de Margaret Thatcher, en el que se propone un drástico recorte en las prestaciones sociales que forman el llamado Estado del bienestar: educación, sanidad y pensiones.

El informe ha sido elaborado por la Central Policy Review Staff, y llegó a manos del Gobierno el pasado 9 de septiembre. Según los planes actuales y las malas perspectivas de crecimiento económico, señala el informe, el gasto público seguirá suponiendo al menos un 45% del producto interior bruto -un 1 % menos que en los momentos álgidos del laborismo- y podría llegar a un 60 % antes del final de esta década.Según estas propuestas, el Estado debería dejar de financiar la educación superior, con lo cual, tres años de universidad vendrían a costar dos millones y medio de pesetas a los padres. El informe propone la creación de 300.000 becas para paliar algunos inconvenientes.

En la educación pública primaria y secundaria, los padres tendrían que pagar 190.000 pesetas en matrículas por cada hijo.

El actual sistema de Seguridad Social, de ser aceptadas estas propuestas, daría paso a un sistema privado, que supondría a una familia de cuatro personas unos gastos adicionales anuales de 120.000 pesetas. El informe sugiere, asimismo, poner fin a las subidas de las pensiones y seguros sociales según el índice de la inflación, con lo que los afectados verían caer su nivel de vida.

Con estas medidas, el Estado podría ahorrarse 11.000 millones de libras (2,2 billones de pesetas) anuales. El informe, con el sello del Tesoro, ha sido distribuido a los diversos departamentos ministeriales para su estudio. Sin embargo, cuando fue presentado al Consejo de Ministros del 9 de septiembre, los representantes del sector moderado del Partido Conservador se rebelaron y bloquearon la discusión sobre el tema. Son las primeras tomas de posiciones de cara al contenido del próximo manifiesto electoral del Partido Conservador, en el cual les gustaría a los duros que apoyan la política de la primera ministra ver incluidas estas propuestas.

En lo inmediato, el Gobierno tiene que hacer frente al día de acción sindical en apoyo de las enfermeras y personal auxiliar sanitario. Estos piden una subida salarial de un 12%. El Gobierno, queriendo guardar bajo control el gasto público, no ofrece más de un 6,5%, con el índice de inflación estabilizado en tomo a un 8% anual. A su nivel más bajo, estos trabajadores vienen a ganar unas 54.000 pesetas mensuales (sin contar las horas extras).

Al día de acción sindical se han sumado ya los mineros, varios municipios, parte de los funcionarios y diversos sectores industriales. No se publicarán periódicos. Los pubs seguirán abiertos. Los trenes funcionarán, ya que hay que ayudar a los manifestantes a llegar al londinense Hyde Park.

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